Según distintos analistas, el desafío será que el país mantenga una posición realmente neutral en un momento determinante para la política internacional.
El presidente José Raúl Mulino ha venido aprovechando sus intervenciones dentro y fuera de Panamá para remarcar la membresía que tendrá el país centroamericano de manera no permanente en del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) durante el período 2025-2026.
“La primera misión allí es valorar los temas que en este momento están siendo estudiados en la agenda, como la crisis en Medio Oriente, la guerra de Ucrania y otros temas más”, sostuvo Mulino.
Esta será la sexta ocasión en que la República de Panamá participa de este organismo, lo que es identificado por algunos sectores como un reto que debe ser consecuente con la política exterior que le permitió al país recuperar la Zona del Canal interoceánico mediante negociaciones con Estados Unidos en la década de 1970, apelando al multilateralismo y el acercamiento al Sur Global.
Este último señalamiento responde al acercamiento que el presidente de Panamá ha tenido con Ucrania e Israel en medio de importantes conflictos globales de la actualidad.
Junto a Panamá, Somalia, Pakistán, Grecia y Dinamarca también ocuparán temporalmente un lugar en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, en uno de los momentos más intensos de la política internacional durante los últimos años.
John Alonso, Ciudad de Panamá.
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