Abu Obeida, el portavoz de las Brigadas Ezzedin Al-Qassam, el brazo armado del Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS), ha subrayado que lo que el enemigo no logró mediante la guerra, no lo tomará mediante amenazas y trucos, y que el camino más corto es obligar al enemigo a cumplir el acuerdo de alto el fuego firmado en enero.
Ha puesto énfasis en que las amenazas de guerra del enemigo solo le acarrearán decepción y no conducirán a la liberación de sus retenidos en Gaza. También ha avisado a las familias de los israelíes detenidos de tener pruebas de que estos siguen con vida.
El funcionario de HAMAS ha dicho que el régimen de ocupación es el que provoca la muerte de sus retenidos, además de su sufrimiento, y apuntado a Israel como el responsable de la evasión de los acuerdos.
“Estamos preparados para todas las posibilidades y cualquier escalada de la agresión contra nuestro pueblo conducirá a la muerte de un número considerable de retenidos del enemigo”, ha expresado.
Asimismo, Abu Obeida ha considerado las amenazas de la entidad ocupante como un signo de debilidad y un sentimiento de humillación, mientras ha saludado a Yemen por reiterar la decisión de apoyar y prepararse para atacar al enemigo [israelí].
Ha precisado que “los ojos ciegos de los regímenes occidentales no ven la diferencia, sino que lloran por las decenas de prisioneros enemigos y no les importa la seguridad de nuestros prisioneros”.
En tal sentido, ha hecho un llamamiento a todas las personas de espíritu justo y a los defensores de los derechos humanos para que expongan el crimen cometido contra los presos palestinos agregando que el mundo es testigo de cómo la resistencia ha estado dispuesta a tratar bien a los retenidos, en cumplimiento de la ética de su religión y hecho alusión a la buena salud de los israelíes detenidos, a pesar de la dificultad de preservar sus vidas a la luz de la guerra bárbara.
Igualmente, ha puntualizado que Israel trata de evadir el acuerdo en un intento del primer ministro, Benjamín Netanyahu, de poner los intereses partidistas por encima de las vidas de sus prisioneros.
Israel y HAMAS firmaron un acuerdo de alto al fuego en enero pasado, cuya primera fase ya expiró, y el régimen de Tel Aviv se niega a reanudar las conversaciones para pasar a la segunda etapa, mientras lanza amenazas de reiniciar el genocidio.
gec/ctl/tmv
