Mediante un comunicado, Abdul-Rahman Shadid, funcionario del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), subrayó que “los palestinos deben visitar la mezquita de Al-Aqsa durante el mes de ayuno de Ramadán—mes sagrado del Islam que comenzó el viernes en Palestina ocupada— y permanecer allí para realizar los rituales religiosos correspondientes a este mes”.
Shadid recalcó que los palestinos no deben aceptar las restricciones del régimen israelí y deben defender sus derechos históricos y religiosos con respecto a esta mezquita.
“Llamo a una gran multitud a la mezquita de Al-Aqsa durante el mes sagrado del Ramadán, y a romper las restricciones de la ocupación sionista y sus medidas militares en la ciudad ocupada de Al–Quds (Jerusalén)”, dice el comunicado.
El funcionario de HAMAS dijo que “todos los residentes de la ciudad de Al-Quds, los territorios ocupados en 1948 y Cisjordania que tienen acceso a la mezquita deben protegerla”.
Shadid hizo hincapié en que las restricciones impuestas por los ocupantes y sus proyectos de asentamientos ilegales no pueden cortar la conexión entre la mezquita sagrada y sus legítimos propietarios, por el contrario, esas medidas fortalecerán la determinación de los palestinos de proteger el lugar y resistir los planes de judaización.
Los comentarios de Shadid vienen después de que el lunes, 24 de febrero, la televisión israelí revelara planes de las autoridades sionistas para limitar el acceso a la Explanada de las Mezquitas, donde se encuentra la Mezquita de Al-Aqsa, a hombres por encima de 55 años de edad, mujeres por encima de 50 y menores de 12 años, muchos de ellos residentes de Cisjordania ocupada.
Conforma a la agencia de noticias turca Anadolu, la emisora pública israelí KAN informó que el régimen planea desplegar 3000 efectivos militares en los puestos de control que conducen a la mezquita Al-Aqsa durante el Ramadán para impedir que los prisioneros palestinos recientemente liberados entren en la zona que rodea el lugar sagrado.
El régimen israelí tiene una larga historia de restricciones al acceso de los palestinos a la mezquita, incluso durante el Ramadán, lo que ha enfrentado la resistencia de la nación oprimida.
Israel ocupó la zona oriental de Al-Quds, donde se encuentra la Mezquita de Al-Aqsa, durante la guerra árabe-israelí de 1967. En 1980, se anexionó toda la ciudad en una medida que la comunidad internacional nunca ha reconocido.
gth/ncl/tqi
