Los medios han informado de más de 70 ataques israelíes desde la medianoche del domingo y la madrugada de este lunes contra la Franja de Gaza. Las acciones se concentraron en las cercanías del complejo gubernamental de Ansar, que alberga las oficinas del Ministerio del Interior y las fuerzas de seguridad gazatíes.
Una serie de ofensivas también se produjo en la calle Al-Rasheed, en las inmediaciones del hospital Al-Shifa y los vecindarios de Tel Al-Haw y Al-Zaitun.
Los operativos tenían como objetivo “los emplazamientos militares” de las facciones palestinas, según alegan las fuentes israelíes. Reportes informan también de columnas de humo denso y explosiones en diferentes zonas de la ciudad de Gaza.
Antes de eso, la artillería israelí bombardeó posiciones en el este de la ciudad de Jan Yunis y los edificios de Al-Burij y Al-Maghazi, ambos en el sur de la asediada Gaza. Además, una casa en el barrio en Rafah y otra en Sabra quedaron dañadas.
En paralelo, el régimen israelí ha continuado reprimiendo a los palestinos en el barrio de Sheij Yarrah en A-Quds (Jerusalén) y el resto de la ocupada Cisjordania.
Por su parte, las facciones palestinas han lanzado una serie de ataques con cohetes hacia los asentamientos ilegales desde la Franja de Gaza y se escucharon sirenas en las ciudades Ashkelon, Beersheba y los asentamientos de Ofakim y Netfoot.
Desde el lunes, 10 mayo, las fuerzas israelíes han lanzado innumerables ataques a Gaza, disparando indiscriminadamente a la población y las infraestructuras civiles. Israel, además de ver “justo” el asesinato de civiles, vincula sus bombardeos incesantes con los ataques de represalia de la Resistencia palestina lanzados desde Gaza, que han dejado daños en las posiciones israelíes en los territorios ocupados de Palestina.
En reacción a las declaraciones del domingo del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, sobre la campaña militar contra Gaza, el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) aseguró que Netanyahu está tratando de comercializar una victoria delirante para encubrir su fracaso ante las sorpresas de la Resistencia.
El Ministerio de Salud palestino anuncia que el número de muertos por las agresiones israelíes contra Gaza ha aumentado a 198, incluidos 58 niños y 34 mujeres, y 1235 heridos, mientras que el número de muertos debido a la represión israelí en Cisjordania, incluido Al-Quds, llegó a 21 muertos, incluido un niño, y más de 4369 heridos.
El domingo, Amnistía Internacional (AI) hizo sonar las alarmas sobre posibles crímenes de guerra que Israel comete en Gaza, en concreto tras su ataque contra una torre civil y un edificio que albergaba las oficias de la cadena Al-Jazeera y la agencia Associated Press (AP), así como el campamento de refugiados de Al-Shati, y ha pedido a la Corte Penal Internacional (CPI) que investigue estos crímenes.
Una investigación de la cadena catarí Al-Jazeera revela que Israel ha utilizado las bombas estadounidenses, como GBU-31 y GBU-39, que son altamente explosivas y destructivas en sus ataques a Gaza, incluido para destruir la torre Al-Yala.
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