Según un informe publicado el lunes por el diario británico Daily Telegraph, los reclutadores de Daesh, bajo la apariencia de jóvenes trabajadores en el suburbio de Bankstown, en la ciudad de Sídney, se infiltran en la parte de los servicios de bienestar de la juventud de Australia y tratan de reclutar a los jóvenes para unirse a las filas de esta rama extremista.
Ellos (EIIL) les ofrecen a los jóvenes la amistad, refugio, alimentos, medicamentos, dinero y todo lo que no podían conseguir en otro lugar, convenciéndolos que ellos no les importan a sus familias y amigos", advierte un extrabajador de la juventud en Bankstown.
Además, el informe agrega que los elementos vinculados con el EIIL realizan citas clandestinas con estos jóvenes sin informar a sus familias y los funcionarios de seguridad.
"Ellos (EIIL) les ofrecen a los jóvenes la amistad, refugio, alimentos, medicamentos, dinero y todo lo que no podían conseguir en otro lugar, convenciéndolos que ellos no les importan a sus familias y amigos", ha comentado al diario Sarkis Achmar, un extrabajador de la juventud en Bankstown.
Poniendo como un ejemplo, Achmar ha nombrado a Abdulá Elmir quien actuó como un trabajador de la juventud en Bankstown para atraer a los adolescentes vulnerables hace tres años.
En este sentido, Greg Barton, profesor del Centro de Investigación del Terrorismo Internacional en la Universidad pública de Monash, asegura al rotativo que las mejores localizaciones para "reclutadores depredadores" de EIIL son los lugares donde se reúnen los jóvenes con problemas.
"Las técnicas que normalmente utilizan (EIIL), para atraer a los jóvenes son las mismas que cínicamente las emplean estafadores, redes de drogas y peluqueros sexuales", ha precisado Barton.
Asimismo, ha agregado que los jóvenes australianos que no tienen experiencia de combate, a menudo reciben lavado de cerebro por parte de los integrantes de Daesh para llevar a cabo ataques suicidas.
Recientemente el Gobierno de Australia ha ratificado una ley según la cual penaliza a los individuos que intenten viajar a Siria e Irak con intención de unirse al EIIL. Los acusados podrían enfrentar hasta 10 años de prisión.
El pasado mes de marzo, el diario australiano Sydney Morning Herald reveló que un grupo criminal de Australia ha estado enviando secretamente aspirantes a terroristas desde Canberra (capital australiana) a Siria para unirse al grupo takfirí EIIL.
Según estimaciones del Gobierno de Canberra, 110 australianos han viajado a Siria e Irak para unirse al EIIL, entre ellos una veintena ha perdido la vida en los combates.
A finales de mayo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) afirmó que la cifra de extranjeros que se unen a las filas de bandas terroristas, sobre todo a Daesh, ha crecido en un 70 % entre mediados de 2014 y marzo de 2015.
Los observadores políticos creen que el aparato propagandístico de Daesh ha jugado un papel importante en el impulso de sus reclutamientos.
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