En el marco de la conmemoración del 15 de septiembre, fecha marcada por la Independencia de la corona española, jóvenes realizaron una manifestación hasta el centro de la capital (Tegucigalpa); allí se sucintaron los enfrentamientos.
Los sindicatos y organizaciones sociales participaron en la manifestación, sin la compañía de los supuestos partidos de oposición; a quienes exigen lograr que la nueva ley electoral no permita la reelección.
Al llegar al centro de la capital, la Policía empezó una persecución contra los manifestantes. Cual jauría a sus presas, solo por gritar ¿Dónde está el dinero?
La pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, había generado un decaimiento en las protestas en Honduras, pero la amenaza de una nueva reelección ilegal y el robo del dinero destinado a luchar contra la COVID-19 alentaron de nuevo a los hondureños.
La dirigencia de los partidos políticos de oposición fueron los ausentes de la protesta. Solo invitaron a sus simpatizantes a protestar en las redes sociales.
Varios heridos de gravedad y detenidos, surgieron de la manifestación debido al uso de la fuerza de la Policía de Hernández. Pero los uniformados demostraron una vez más que sin sus armas y bombas no pueden hacerle frente a una población enfurecida, por eso tuvieron que huir del lugar.
Las franquicias de comidas rápidas volvieron a prestar sus edificios a la Policía para poder vigilar y reprimir a los manifestantes, quienes fueron sacados del lugar al ser descubiertos.
Dassaev Aguilar, Tegucigalpa.
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