• La ​​gente se reúne para asistir a la ceremonia fúnebre pública de los líderes de Hezbolá, Seyed Hasan Nasralá y Hashem Safi al-Din, en Beirut, Líbano, 23 de febrero de 2025.
Publicada: martes, 4 de marzo de 2025 16:11

El movimiento Hezbolá del Líbano revela la complicidad directa de Estados Unidos en la guerra israelí contra los libaneses y el asesinato de Seyed Hasan Nasralá.

Nawaf al-Musawi, responsable del expediente de recursos y fronteras del Movimiento de Resistencia Islámica del Líbano (Hezbolá), resaltó en una entrevista concedida el lunes a la cadena local Al-Mayadeen el papel directo de Estados Unidos en los crímenes atroces del régimen sionista contra los libaneses y en el asesinato del líder del movimiento libanés, Seyed Hasan Nasralá.

Según Al-Musawi, pese a que Washington ha intensificado las operaciones de inteligencia contra Hezbolá diez veces más en los últimos 25 años, el movimiento de Resistencia sigue firme y manteniendo su capacidad de golpear a los ocupantes.

De igual modo, señaló que los tipos de misiles utilizados para atacar la sede de Nasralá en el vecindario de Dahiya en Beirut, capital del Líbano, “no formaban parte del arsenal de Israel y fueron traídos específicamente para este ataque”.

Al-Musawi celebró que la Resistencia infligió pérdidas significativas a la ocupación israelí durante la guerra, aludiendo, en particular, a la operación en la que un dron de Hezbolá alcanzó la residencia del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.

 

Seyed Hasan Nasralá cayó mártir en un ataque aéreo israelí en septiembre pasado al sur de Beirut, tras comandar durante más de un año los combates contra el régimen de Israel en apoyo al pueblo y la Resistencia palestinos en la Franja de Gaza.

La postura de Estados Unidos en relación con la guerra de Israel contra el Líbano ha estado marcada por un fuerte apoyo a Israel, tanto en términos políticos como militares y de financiamiento.

Es más, EE.UU. ha promovido operaciones de inteligencia contra Hezbolá, en un intento por debilitar la influencia de este grupo en la región de Asia Occidental.

El 23 de febrero, el líder de Hezbolá, el sheij Naim Qasem, se dirigió a cientos de miles de participantes en el funeral de Nasralá, prometiendo seguir el camino trazado por su predecesor martirizado en un bombardeo israelí en septiembre. “Permaneceremos fieles al legado que se nos ha confiado y continuaremos por ese camino”, recalcó.

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