El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado los detalles de las tarifas que impondrá a todos los países. Frente a esto, los líderes de las naciones afectadas reaccionan, unos con retórica y otros con acciones concretas.
China, el principal socio comercial de EE.UU. y gravado con un alza del 34 % en los aranceles, ha tomado sus propias medidas, que van desde aranceles similares, hasta la prohibición de nuevas inversiones chinas en empresas norteamericanas, en consonancia con su oposición a las medidas de Trump.
El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, estima que el aumento de más del 20 por ciento de los aranceles estadounidenses a los productos europeos, es un ataque unilateral por parte de Trump, y asegura que esta no es una manera inteligente de encarar los desafíos actuales.
Las medidas anunciadas por el mandatario norteamericano y las respuestas de otras naciones podría provocar una escalada arancelaria, seguida de un alza en los precios finales de los productos y bienes de consumo, pero, al mismo tiempo, provocaría concesiones comerciales y políticas de aquellas naciones más afectadas.
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