Los veteranos de las guerras estadounidenses no sirven para la propaganda “patriótica” cuando quedan mutilados.
Esta escena pertenece a la película Jacob's Ladder. El film explora los traumas psicológicos y físicos experimentados por los veteranos de guerra. Sujetos a un experimento de violencia, muerte y dólares destinados al Complejo Militar Industrial, estos soldados peleaban por su país, pero cayeron en cuenta de que su fervor patriótico era más bien capitalizado por corporaciones.
En el día de los veteranos, este grupo denuncia al Gobierno y a las fuerzas armadas como títeres de los intereses económicos del imperialismo. El enemigo no es vietnamita, iraquí, afgano, ni comunista. El enemigo es el que lucra con la expropiación del capital y recursos de las naciones.
Estos son los veteranos de guerra que Estados Unidos esconde. A estos se les deja abandonados a su suerte, entre problemas mentales e incapacidad física.
La cultura bélica estadounidense dicta la narrativa de la guerra permanente. Los enemigos se fabrican a medida que la necesidad de lucro de las corporaciones se interesa en las naciones que no comulgan con las agendas monetarias del capitalismo de consumo dirigido.
Marcelo Sánchez, Washington.
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