El jefe de Estado, durante su primera reunión con los periodistas de la Casa Blanca desde los comicios presidenciales, ha mencionado que “va a ser algo muy difícil” que acepte el resultado de las presidenciales, incluso cuando se espera que el Colegio Electoral certifique formalmente la victoria de Biden.
En otra parte de sus declaraciones, el magnate neoyorquino ha señalado que si el Colegio Electoral vota por el demócrata y certifica su victoria, cometerá “un error” aunque ha asegurado que aceptaría el resultado y abandonaría la Casa Blanca.
El 8 de diciembre culmina el plazo para resolver disputas electorales en los estados. Posteriormente, los miembros del Colegio Electoral se reunirán el 14 de diciembre para oficializar el resultado y proclamar el próximo presidente del país norteamericano.
El jefe de Estado sigue sin reconocer la victoria de Biden en los comicios, circunstancia que ha hecho sonar las alarmas ante la posibilidad de un golpe de Estado en EE.UU. por parte de grupos armados de extrema derecha cercanos al mandatario republicano.
Asimismo, desde el momento en que la victoria de Biden se hizo evidente, Trump y su Administración no dieron ningún paso para iniciar el proceso de transición de poder. Al respecto, algunos republicanos le criticaron, entre ellos, el gobernador republicano de Arkansas, Asa Hutchinson, quien subrayó que el proceso debe empezar cuanto antes.
“Es muy importante que Joe Biden pueda participar en las reuniones informativas diarias de inteligencia para asegurarse de que esté preparado y comenzar a abordar la crisis del nuevo coronavirus”, enfatizó en una entrevista concedida el 15 de noviembre a la cadena NBS News.
Biden ganó las elecciones con 306 votos en el colegio electoral, mucho más de los 270 requeridos, frente a los 232 de Trump. Además logró 6 millones de votos populares más que su rival republicano.
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