El Gobierno estadounidense, presidido por Donald Trump, incluyó el lunes al Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán en su lista de organizaciones terroristas extranjeras, acusando a la entidad militar de élite iraní de “financiar y promover el terrorismo como una herramienta política”.
Este hecho, a juicio del analista internacional Fernando Cocho, entrevistado este martes por la cadena HispanTV, ha sido “sin precedentes”, ya que es la primera vez que Washington cataloga como “terrorista” a una entidad vinculada oficialmente a un Gobierno extranjero, tal y como lo subrayó el propio Trump tras dar a conocer su decisión.
“Evidentemente, es una medida política y es un regalo. Desconocemos la motivación que hay detrás, hacia Israel y hacia (el premier del régimen de Tel Aviv) Benjamín Netanyahu”, ha indicado el experto.
No obstante, Cocho ha señalado que uno de los móviles detrás de la medida es posiblemente “desviar la atención de otros problemas” que el inquilino de la Casa Blanca tiene en otras áreas del orbe.
Evidentemente, es una medida política y es un regalo. Desconocemos la motivación que hay detrás, hacia Israel y hacia (el premier del régimen de Tel Aviv) Benjamín Netanyahu”, ha indicado el analista internacional Fernando Cocho en alusión a la decisión de EE.UU. de incluir al Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán en su lista de organizaciones terroristas extranjeras.
A su vez, Netanyahu no tardó ni un día en agradecer al mandatario norteamericano su decisión, afirmando que beneficia tanto a Israel como a los países de la región.
El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha resaltado, por su parte, este mismo martes, los logros del CGRI y sus victorias frente a los enemigos de Irán y los terroristas, además de señalar que lo que ha hecho EE.UU. constituye una importante muestra de la hostilidad que siente el Gobierno del país norteamericano hacia este brazo militar iraní, para luego aseverar que la perversidad de Washington con la Revolución Islámica acabará fracasando.
De igual modo, en otra parte de la entrevista, el analista ha puesto de relieve que los logros que ha cosechado la Revolución Islámica en varios campos, en los últimos 40 años, desde su triunfo en 1979, se traducen en que Irán es capaz, lo solo de mejorar su economía, sino también de encontrar otros aliados que no sean EE.UU.
Fuente: HispanTV Noticias
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