La hija y consejera del presidente de EE.UU., Donald Trump, que hablaba el domingo en una reunión con un grupo de destacadas mujeres saudíes en Riad, capital saudí, dijo que la monarquía Al Saud había obtenido un progreso “alentador” en lo que respecta a los derechos de las mujeres, pero admitió que todavía había “mucho trabajo por hacer”.
A finales del discurso de Ivanka, se les pidió a los periodistas abandonar la sala antes de que surgieran cuestiones relativas a la igualdad de género en Arabia Saudí, donde las féminas sufren una aguda discriminación sexual, y prácticamente no tienen derecho a nada.
En el mismo foro, el presidente del Banco Mundial (BM), Jim Yong Kim, dijo que los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Arabia Saudí se comprometieron a donar 100 millones de dólares para el fondo de mujeres empresarias, un proyecto mundial que fue impulsado por Ivanka Trump y la canciller alemana, Angela Merkel.
También el domingo, Melania Trump, la primera dama de EE.UU., que acompaña a su esposo en su primer periplo por Oriente Medio, aclamó en Riad el “empoderamiento de las mujeres” en Arabia Saudí mientras hablaba en un centro de servicio de General Electric para las mujeres.
Enjoyed talking to the incredible women working hard @GE_Saudi service center. Great strides being made towards the empowerment of women. pic.twitter.com/bXdES83w3P
— Melania Trump (@FLOTUS) May 21, 2017
Arabia Saudí es el único país en el mundo donde las mujeres no están legalmente autorizadas a conducir. Las mujeres saudíes no pueden tomar decisión alguna sin la venia de un varón de su familia ni salir a la calle o viajar sin escolta masculina.
De acuerdo con un informe sobre la brecha de género del Foro Económico Mundial, Arabia Saudí ocupa el puesto 141 entre los 144 países analizados.
No obstante, Trump y sus funcionarios gubernamentales en su estancia de dos días en Riad no plantearon ninguna de estas preocupaciones respecto al derecho de las mujeres ni las flagrantes violaciones de los derechos humanos que se cometen diariamente en la monarquía saudí.
“No estamos aquí para dar lecciones, no estamos aquí para decir a los demás cómo vivir (...)”, afirmó el domingo Trump en su discurso ante una cumbre con los líderes árabes y musulmanes, rehusando plantear cuestiones relacionadas a los derechos humanos.
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