Un funcionario del Pentágono, en calidad de anonimato, ha explicado que el destructor lanzamisiles USS Lassen permanecerá a unos 22 kilómetros de los arrecifes de Subi y Mischief, que forman parte de las disputadas islas Spratly.
Es extremadamente importante, sobre todo en una región como el mar Meridional chino, ya que anualmente a través de esa zona se realizan negocios por miles de millones de dólares (…) para la economía mundial resulta de suma importancia confirmar el libre comercio en esa región", ha subrayado el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
Asimismo, ha afirmado que la nave estará acompañada por un avión de reconocimiento Boeing P-8A, y el avión P-3 Orion, que llevan a cabo frecuentemente misiones espías en la región del Mar del Sur de China.
De acuerdo con las fuentes, es muy probable que esta decisión aumente las tensiones entre Washington y Pekín en medio de desacuerdos por distintos temas, incluido el espionaje cibernético y económico.
En este contexto, el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, rechazando los informes sobre el desplazamiento de las naves, ha dicho que “es mejor interrogar al Ministerio de Defensa sobre la realización de operaciones de ese tipo”.
El vocero de Casa Blanca luego de recordar que EE.UU. realiza vuelos en concordancia con el derecho internacional, ha insistido que el mar de China Meridional nunca fue y no será una excepción.
"Es extremadamente importante, sobre todo en una región como el mar Meridional chino, ya que anualmente a través de esa zona se realizan negocios por miles de millones de dólares (…) para la economía mundial resulta de suma importancia confirmar el libre comercio en esa región", ha subrayado Earnest.
El mar de China Meridional es una extensión muy disputada del océano Pacífico. Pekín reclama casi un 90 % de los territorios; varios países, entre ellos Filipinas, Vietnam, Malasia y Brunéi, también tiene reclamaciones territoriales.
Las relaciones entre Pekín y Washington se volvieron tensas en los últimos años por las reclamaciones territoriales de China y se ahondaron con la construcción de islas artificiales por el país asiático.
Por su parte, Pekín, en reiteradas ocasiones, ha acusado a Washington de tratar de dominar este mar y militarizar la zona. El pasado 28 de julio, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino pidió a EE.UU. que deje de inmiscuirse en disputas del mar de China Meridional.
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