Ben-Gvir, ministro de seguridad interna, en su cuenta de X ha llamado este domingo al gabinete de Israel a “aplastar” al Movimiento de la Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) y “pisotear su cabeza hasta que se rinda completamente”.
“Se debe detener la transferencia de toda ayuda humanitaria y combustible hasta que todos [los cautivos] por HAMAS sean liberados”, escribió el extremista ministro sionista. Añadió que las autoridades israelíes deben “fomentar la inmigración y ocupar los territorios de la Franja de Gaza para mantenerlos en nuestras manos permanentemente”.
La declaración de Ben-Gvir se suma a otros comentarios escandalosos de autoridades israelíes que han provocado condenas y estupor en la comunidad mundial.
En efecto, el ministro de finanzas israelí, Bezalel Smotrich, manifestó el lunes que bloquear la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza es “justificado y moral”, incluso si causa que dos millones de civiles mueran de hambre en el territorio costero palestino.
El régimen de Israel lanzó una guerra genocida contra Gaza el 7 de octubre después de sufrir un fracaso sin precedentes durante la operación especial Tormenta de Al-Aqsa, ejecutada por HAMAS el 7 de octubre pasado contra objetivos militares israelíes en los territorios ocupados, en respuesta a décadas de crímenes de la entidad sionista contra los palestinos.
La guerra de Israel contra Gaza, que el sábado pasó su día 309, ha dejado un saldo de 39 790 palestinos muertos, en su mayoría mujeres y niños, y de unos 91 702 heridos. Se estima además que otros 10 000 están sepultados bajo escombros.
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