“Impedir la entrada de alimentos en Gaza es la continuación por parte de Israel del uso de la hambruna como arma de guerra”, ha criticado el Ministerio de Asuntos Exteriores de Sudáfrica, en un comunicado difundido este miércoles.
Ha resaltado el “sufrimiento inconmensurable” que el pueblo palestino enfrenta en Gaza por la falta de alimentos, refugio y suministros médicos, y ha subrayado que el país africano ha presentado una denuncia por genocidio contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
“Sudáfrica hace un llamado a la comunidad internacional para que responsabilice a Israel”, ha instado.
El domingo, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, anunció el bloqueo de la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza y advirtió “consecuencias adicionales” si el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) no aceptaba la nueva propuesta de prórroga de la primera fase de un frágil alto el fuego.
HAMAS reclama que las partes se ciñeran al acuerdo alcanzado en enero, que contemplaba el inicio, el 2 de marzo, de la segunda fase del pacto.
El ministro de extrema derecha de Israel, Itamar Ben-Gvir, dijo en una publicación reciente en X que el gabinete de Benjamín Netanyahu debería “ordenar el bombardeo de las reservas de ayuda que se acumularon en Gaza en enormes cantidades durante y antes del alto el fuego, junto con un corte completo de la electricidad y el agua”.
Ben-Gvir sugirió además que se deberían tomar tales medidas para “matar de hambre” a los palestinos para luego poder “aplastarlos fácilmente”.
La decisión de Israel de bloquear el envío de ayuda humanitaria a Gaza ha provocado duras condenas de todo el mundo y de organizaciones internacionales. El comisionado general de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA), Philippe Lazzarini, criticó el martes que la ayuda y estos servicios básicos no son negociables y “nunca deben utilizarse como armas de guerra”.
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