“Ciertos países intentan poner en tela de juicio su legitimidad (…), ven una aspiración políticamente motivada a desestabilizar la situación”, denunció el jueves la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, durante una conferencia de prensa.
La diplomática destacó que los expertos rusos presentes como veedores internacionales en los comicios confirman que el proceso electoral se celebró con estricta conformidad con la legislación, pues dejó claro que solo el pueblo venezolano, como poseedor de la soberanía, tiene el derecho a determinar las vías de su desarrollo.
Zajárova resaltó también la participación del sector opositor en las elecciones regionales y municipales del 21 de noviembre del país suramericano y lo calificó de un testimonio de madurez política de Venezuela.
La jornada electoral contó con la presencia de más de 300 veedores internacionales y misiones de observación, entre ellos, la Unión Europea (UE), la Organización de Naciones Unidas (ONU), el Centro Carter de Estados Unidos y el Consejo de Expertos Electorales de Latinoamérica (Ceela), entre otros.
En las referidas elecciones, el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) se hizo con el 20 de un total de 23 gobernaciones del país, mientras que la oposición ganó los otros tres estados en disputa.
Después de los comicios en Venezuela, la jefa de la misión de observadores de la Unión Europea, Isabel Dos Santos, alegó que el proceso electoral mostró la “persistencia de deficiencias estructurales”, aunque mejoraron las condiciones electorales en comparación con procesos electorales anteriores.
Venezuela ha rechazado los intentos occidentales para desacreditar las elecciones, en las que según el informe de la Red de Intelectuales en Defensa de la Humanidad, unos 8 151 793 ciudadanos acudieron a las urnas a ejercer el derecho al sufragio, es decir, el 41,8 % de la población convocada, lo que se ha considerado por los veedores una tasa extraordinaria a nivel internacional.
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