El portal estadounidense Bloomberg, citando a fuentes anónimas, ha informado este miércoles que “la Administración Trump está considerando imponer sanciones adicionales a Venezuela para detener las transacciones de combustible restantes permitidas con Caracas”.
Según el rotativo, las sanciones pueden apuntar a “los intercambios de crudo con empresas europeas y asiáticas”, y que la Casa Blanca ha debatido las medidas durante al menos cinco meses, priorizando inicialmente las sanciones contra Irán sobre sus suministros de gasolina a Venezuela.
Respecto a las acusaciones del Gobierno estadounidense sobre los cuatro tanqueros que iban rumbo a Venezuela y que fueron interceptados recientemente por EE.UU., el rotativo asevera que tales sanciones se imponen para evitar cualquier exportación al país bolivariano.
Pese a que EE.UU. alega que dichos barcos fueron de propiedad iraní, Teherán ha hecho hincapié en que “ni los dueños ni su bandera tiene nada que ver con Irán”.
Esto se ha producido después de que Estados Unidos anunciara a fines de junio que Washington había impuesto sanciones a los capitanes de cinco petroleros iraníes que entregaron en mayo 1,53 millones de barriles de gasolina y aditivos a Venezuela, un país afectado por una grave escasez de combustible causada por las sanciones estadounidenses.
Todos los petroleros llegaron a Venezuela uno tras otro sin que EE.UU. hiciera nada para evitarlo, pese a haber amenazado con intervenir si la República Islámica entregaba combustible al país sudamericano.
rtk/lvs/myd/rba