En una entrevista con cadena de noticias rusa Sputnik, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha indicado este domingo que el texto del “gran” acuerdo ya está listo y acordado por las partes.
“El nuevo gran acuerdo, cuyo texto está listo desde hace mucho tiempo y fue acordado por las partes, es integral, de largo plazo y para todo clima y en este sentido no requiere ningún ajuste”, ha afirmado Lavrov.
Hizo estas declaraciones tras la toma de Damasco el 8 de diciembre por grupos militantes armados, liderados por Hayat Tahrir al-Sham (HTS) y la caída del gobierno de Bashar al-Asad.
Además, Lavrov sostuvo que el acuerdo tiene como objetivo consolidar jurídicamente el progreso sin precedentes en las relaciones bilaterales logrado por los dos países en los últimos años y registrar su ingreso al nivel de asociación estratégica, añadiendo que “por supuesto, un documento tan completo también tiene un componente internacional”.
Entre otras cosas, destacó, el acuerdo presta especial atención al fortalecimiento de la interacción en interés de la paz y la seguridad a nivel regional y global y establece el deseo de Moscú y Teherán de una cooperación más estrecha en las áreas de seguridad, defensa, lucha contra el terrorismo y el extremismo, y contrarrestar muchos otros desafíos y amenazas comunes.
A principios de este mes, el presidente ruso, Vladímir Putin, anunció su expectativa de que el nuevo acuerdo estratégico con Irán se firmara durante la próxima visita del presidente de Irán, Masud Pezeshkian, a Rusia.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó que, si bien no se ha fijado ninguna fecha para la visita de Pezeshkian, Moscú y Teherán siguen firmes en su compromiso de firmar el acuerdo de asociación integral sin demora.
Desde 2015, las relaciones bilaterales entre Irán y Rusia se han ampliado significativamente en los ámbitos económico, político y regional.
Ambos países desean elevar su relación a un nivel estratégico y abrir nuevas oportunidades de cooperación.
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