Una vez más, Leningrado, la actual San Petersburgo, recordó 872 días sitiada bajo uno de los peores asedios de la historia de la humanidad. Rusia conmemoró el aniversario 75 del fin del sitio de una manera diferente.
Aprovechó la oportunidad para exhibir músculo. Por primera vez, se celebró un desfile militar que contaba con arsenal pesado y 2500 militares. El presidente Vladimir Putin, de 66 años, no había nacido cuando el asedio tuvo lugar, pero su hermano mayor murió en él. Putin instó a no olvidar las “penurias inhumanas” del cerco.
El bloqueo del Ejército de Adolf Hitler duró desde el 8 de septiembre de 1941 al 27 de enero de 1944. Entre 600 000 y 1,5 millones de personas perdieron la vida por hambre, enfermedades y bombardeos.
Actualmente, unos 108 000 excombatientes y supervivientes viven en San Petersburgo, uno de los símbolos del valor y el sufrimiento del país en tiempos de guerra.
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