En un nuevo paso injerencista, Annalena Baerbock, la ministra alemana de Asuntos Exteriores, anunció este jueves el cierre de los consulados iraníes en Múnich, Hamburgo y Fráncfort, por la ejecución por parte de Irán de Yamshid Sharmahd, cabecilla del grupo terrorista Tondar de nacionalidad iraní y germana, alegando que la medida quiere dejar claro que “asesinar” a un ciudadano alemán tiene consecuencias de peso.
La misma jornada, la Cancillería iraní en un comunicado ha informado que ha citado a Hans-Peter Yougel para trasmitirle la enérgica protesta del país persa por la “irracional decisión del Ministro de Asuntos Exteriores alemán de cerrar consulados de la República Islámica de Irán en Alemania”.
Conforme a la declaración, en esta reunión, el director general para Europa Occidental del Ministerio de Exteriores de Irán “condenó el enfoque destructivo e injustificado del gobierno germano hacia el pueblo iraní, incluidos los iraníes que residen en Alemania”, al privarlos deliberadamente de beneficiarse de instalaciones y servicios consulares, lo que también constituye una “violación de sus derechos básicos”.
Asimismo, advirtió de que “esta acción también equivale a cortar uno de los canales de comunicación más importantes y antiguos entre las dos naciones de Irán y Alemania”.
La Cancillería iraní también considera que el argumento de la ministra de Asuntos Exteriores alemana para cerrar las sedes diplomáticas es “absurdo, intervencionista, poco profesional y carente de decencia y lo considera desprovista de fundamento y valor jurídico”. También enfatiza que el enfoque no constructivo y de confrontación de Alemania es un gran error de cálculo y el gobierno alemán será responsable de sus consecuencias”.
Cierra el mensaje condenando la actitud del Gobierno alemán de faltar el respeto a los principios y normas del derecho internacional y de condenar cualquier apoyo al terrorismo y al asesinato de personas inocentes, incluso con el pretexto de proteger a sus nacionales.
La tensión diplomática surgida a raíz de la aplicación de la ley sobre Sharmahd se desató con comentarios imprudentes e intervencionistas de las autoridades alemanas, por lo que Irán convocó el martes al embajador germano en Teherán para plantearle su molestia al respecto.
Sharmahd era el líder de la organización terrorista Tondar, con sede en Estados Unidos. Fue capturado en Emiratos Árabes Unidos en agosto de 2020 y condenado a la pena capital por liderar un atentado terrorista con bomba en Shiraz (sur) en 2008, en el cual 14 personas perdieron la vida, entre ellos mujeres y niños, y otras 215 resultaron heridas.
ncl/tmv