En un mensaje dirigido este sábado al líder del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasralá, el presidente del Parlamento de Irán, Mohamad Baqer Qalibaf, expresó al gobierno y al pueblo de El Líbano sus condolencias por el martirio de uno de los influyentes comandantes de este movimiento, Ibrahim Aqil, y un grupo de sus compañeros en un ataque israelí el viernes.
“Una vez más, el régimen sionista ha demostrado su incapacidad y desesperación al cometer este acto terrorista, que ha demostrado su falta de habilidad para enfrentar a los valientes combatientes del Eje de Resistencia Islámica en Palestina y El Líbano”, manifestó el legislador iraní.
Qalibaf puso de relieve en su mensaje que, pese a estos martirios, Hezbolá, sin duda, seguirá apoyando al pueblo palestino resistente en su lucha contra la opresión con más determinación que antes hasta el final de la guerra de Gaza y la victoria final de la nación palestina.
Cerró su nota, honrando la memoria de todos los mártires, guerreros y comandantes del Eje de Resistencia y asegurando, que, conforme a la promesa de Dios, Al-Quds y Palestina serán liberadas y, si Dios quiere, y todos los combatientes y la Umma (comunidad) islámica rezarán en la Mezquita de Al-Aqsa.
Por su parte, Ali Akbar Velayati, asesor para Asuntos Internacionales del Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, en otro mensaje separado enviado a Nasralá, expresó sus más sentidas condolencias por la trágica pérdida del destacado líder de Hezbolá, Ibrahim Aqil.
El funcionario iraní afirmó que el mártir Aqil se alzó en defensa de los principios y valores del Islam y subrayó que, aunque la pérdida de valientes líderes como él es profunda, sus sacrificios servirán de fuente de fortaleza para intensificar la resistencia contra el régimen sionista y la influencia de Estados Unidos en la región.
El viernes, el ejército sionista atacó la zona de Dahiya, en el sur de Beirut, capital de El Líbano, lo que provocó el martirio de Ibrahim Aqil y de otras 36 personas, además de dejar 68 heridos.
La ofensiva israelí siguió a un ciberataque masivo israelí que, entre el martes y miércoles, mató a unas 37 personas y causó heridas a otras 3000, al hacer detonar sus dispositivos de comunicaciones como buscapersonas y 'walkie-talkies.
El jueves, el secretario general de Hezbolá consideró el ciberataque israelí como una “declaración de guerra” y aseguró que el régimen de Tel Aviv sin duda recibirá un castigo inevitable por ese crimen abominable.
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