“Esta medida de EE.UU. es un error estratégico que provoca tensión y caos en la región y al final el mismo EE.UU. sufrirá” las consecuencias de esta decisión, ha asegurado este lunes el portavoz del Ministerio de Exteriores de Irán, Bahram Qasemi.
En declaraciones formuladas a los periodistas en su conferencia de prensa semanal, Qasemi ha repudiado la decisión anunciada la semana pasada por el inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, de reconocer la ciudad ocupada palestina de Al-Quds (Jerusalén) como la “capital israelí”.
Se trata de una medida “inmadura y muy peligrosa”, a la cual han dado pie las tensiones actuales entre los países árabes, ha indicado el vocero de la Cancillería iraní para luego señalar que Trump ya había coordinado con ciertos Estados árabes sobre su decisión sobre Jerusalén, antes de anunciarla.
Esta medida de EE.UU. es un error estratégico que provoca la tensión y caos en la región y al final el mismo EE.UU. sufrirá” las consecuencias de esta decisión, indica el portavoz del Ministerio de Exteriores de Irán, Bahram Qasemi.
En este sentido, un alto funcionario iraní reveló días antes la coordinación entre Trump y algunas naciones, supuestamente árabes, sobre el caso de Al-Quds, como parte de un plan para fortalecer al régimen de Israel y normalizar las relaciones con éste.
Además ha tachado de “débil” el comunicado de la Liga Árabe (LA) sobre el anuncio de Washington, el cual no cumplió con las expectativas del mundo islámico y árabe. Al respecto, se ha manifestado esperanzado de que tendrá resultados positivos la cumbre de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) sobre Al-Quds que se celebrará este miércoles en la ciudad turca de Estambul.
Las afirmaciones de Qasemi se enmarcan en la postura que han adoptado los funcionarios persas hacia la cuestión de Al-Quds. En un nivel que va más allá de las condenas y críticas, Irán ha pedido a los países musulmanes que corten sus lazos con EE.UU.
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