Mientras el Gobierno panameño y FQM se mantienen distantes en sus posiciones frente a la renovación del contrato para la extracción de cobre, los trabajadores de la mina denuncian el secretismo con que se viene desarrollando la negociación.
Por el momento no se vislumbra un acuerdo en las negociaciones que mantienen la empresa Cobre Panamá y el gobierno nacional, donde abordan temas que van desde las regalías que debería recibir el país por la exportación de minerales, hasta las condiciones para la terminación del contrato.
Pero en medio de esas contradicciones, se han seguido extrayendo minerales de la región de Donoso, a pesar de las denuncias de distintos sectores, como los trabajadores, que rechazan las amenazas relacionadas a la pérdida de sus puestos de trabajo en medio del conflicto.
Exactamente, un año atrás, el presidente Laurentino Cortizo reducía a trámites los pasos para hacer efectivo el nuevo contrato; sin embargo, el pasado 16 de diciembre, ordenó el cese de operaciones de First Quantum Minerals (FQM) y su subsidiaria Minera Panamá.
Las expectativas se manejan con suspicacia por la población; la decisión de convertir al país centroamericano en un país minero no acarrea una mayor consulta, pero las concesiones para este tipo de proyectos tienen en la mira a más del 50% del territorio nacional.
John Alonso, Ciudad de Panamá
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