La oficial de comunicaciones de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA), Louise Wateridge, ha afirmado este lunes que las fuerzas israelíes estaban masacrando a más civiles palestinos en la región sitiada y utilizando repetidas órdenes de evacuación como cobertura para cometer atrocidades.
“Las huelgas ahora son implacables, el día comienza con la gente comprobando si sus familiares y amigos siguen vivos, y termina con la esperanza de que logren pasar la noche”, ha aseverado Wateridge en su cuenta de X.
De igual modo, UNRWA ha informado que el 80 por ciento de la infraestructura de la Franja de Gaza ha sido destruida desde que Israel lanzó su salvaje campaña militar en el territorio palestino asediado a principios de octubre del año pasado.
Las Naciones Unidas informaron recientemente de que los diez meses de guerra israelí en Gaza han generado aproximadamente 42 millones de toneladas de escombros. Se calcula que limpiar los escombros costará hasta 700 millones de dólares y podría llevar varios años.
Según la ONU, la magnitud de la destrucción en Gaza no tiene precedentes, con barrios enteros reducidos a escombros.
La destrucción traerá más destrucción, dolor e ira
El gran volumen de escombros supone un desafío importante para los esfuerzos de recuperación, tanto desde el punto de vista logístico como financiero.
Las estimaciones de la ONU sugieren que la operación de limpieza podría extenderse durante varios años, algunos dicen que hasta 15 años dada la complejidad y el alcance del trabajo involucrado.
El informe más reciente del organismo mundial también identificó que aproximadamente el 73 por ciento de las instalaciones industriales y comerciales están dañadas en Gaza.
Asimismo, la ONU también remarca que la mayor parte de la población de Gaza ha sido desplazada, incluidos muchos que se han visto obligados a evacuar varias veces.
Este lunes han surgido nuevos informes de muerte y destrucción cuando las fuerzas israelíes lanzaron más ataques letales en las partes centrales y sur de la franja sitiada.
Israel desató una guerra genocida contra la Franja de Gaza como represalia por el fracaso sufrido durante la operación especial Tormenta de Al-Aqsa, ejecutada por el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), el 7 de octubre de 2023 contra objetivos israelíes en los territorios ocupados, en respuesta a décadas de crímenes contra el pueblo palestino.
Hasta la fecha, los indiscriminados bombardeos y la ofensiva terrestre de las fuerzas de ocupación han dejado un trágico saldo de unos 40 139 muertos y 92 743 heridos, mientras que al menos 10 000 víctimas permanecen desaparecidas bajas los escombros.
ght/hnb
