“Las declaraciones amenazantes del secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, contra CPI se consideran como una intimidación contra una autoridad judicial internacional”, ha declarado este lunes Hazem Qasem, un portavoz del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS).
Qasem ha hecho estas declaraciones después de que el pasado sábado Pompeo amenzara a la CPI que puede enfrentarse a “consecuencias” si sigue adelante con su investigación sobre crímenes de guerra de Israel ocurridos en los territorios palestinos.
Para el vocero de HAMAS “esta posición de EE.UU. demuestra el apoyo del país norteamericano a los crímenes de la ocupación contra la nación palestina que les alientan a cometer más atrocidades”.
Con esta postura, ha afirmado el vocero de HAMAS, Estados Unidos se ha convertido en el socio de la ocupación israelí en su agresión contra el pueblo palestino.
En otra parte de sus declaraciones, asimismo, ha pedido llevar ante los tribunales internacionales a los líderes del régimen israelí por sus continuos crímenes cometidos contra la nación palestina.
Israel lanzó una ofensiva contra la asediada Franja de Gaza en el año 2014 que dejó más 2300 civiles muertos y otras decenas de miles de heridos. Israel niega haber cometido crímenes durante esta ofensiva y por víctimas civiles ocasionados en territorios ocupados ilegalmente desde 1948.
No obstante, Palestina se unió oficialmente a la CPI en abril del 2015, lo que permitió al pueblo palestino denunciar a Israel ante la institución por crímenes de guerra.
Las autoridades palestinas, además de la ofensiva de 2014, han venido reclamando que la CPI investigue la represión israelí a las protestas conocidas como la Marcha del Retorno, que comenzaron en 2018 y han dejado un saldo de unos 300 palestinos muertos y más de 16 000 heridos en Gaza.
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