Por Xavier Villar
La intensidad de los sucesos ha sido tal que cuesta creer que todos hayan ocurrido en apenas 12 meses.
Este año, por primera vez en 43 años, un presidente iraní, Ebrahim Raisi, falleció en el ejercicio de su cargo, lo que obligó al país a celebrar elecciones anticipadas. Por otro lado, tras décadas de enfrentamientos indirectos entre Irán e Israel, ambos llevaron a cabo por primera vez ataques militares directos y oficiales, marcando un punto de inflexión en la dinámica del conflicto regional.
En este sentido, el año 1403 marcó el momento en que la República Islámica abandonó su doctrina tradicional de "paciencia estratégica" para adoptar una política de "disuasión activa". Esto implica que, desde una perspectiva estratégica, cualquier ataque contra su personal militar o sus instalaciones será respondido de manera directa.
El cambio de doctrina estratégica ocurrió al inicio del año con el ataque con misiles de Israel al edificio del consulado de la República Islámica de Irán en Damasco en el mes de abril. Como resultado de este ataque, siete miembros de la Guardia Revolucionaria, entre ellos Mohamadreza Zadehí, fueron asesinados.
La respuesta iraní a este ataque fue la conocida como "Operación Promesa Verdadera", llevada a cabo doce días después. Desde el punto de vista militar, la operación consistió en múltiples ataques con drones y misiles, precedidos por una serie de ciberataques dirigidos a la red eléctrica y los sistemas de radar del régimen sionista, lo que resultó en cortes de energía generalizados en la zona. La primera oleada incluyó decenas de drones kamikaze Shahed-136, con un total aproximado de 100 unidades. Tras la primera oleada, se realizaron tres ataques más a intervalos de aproximadamente media hora, lanzando entre 400 y 500 drones en total.
En mayo, el helicóptero que transportaba al presidente Ebrahim Raisi y al ministro de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, entre otras autoridades, se estrelló en una zona montañosa en la frontera con Azerbaiyán. Todos los pasajeros a bordo perdieron la vida.
Una de las doctrinas clave que orientaron la política exterior del gobierno del presidente Raisi fue la de la "buena vecindad", concebida para fortalecer los lazos con los países de la región. Esta doctrina, que sigue siendo el pilar central de la política regional iraní, debe analizarse junto con otras dos líneas estratégicas fundamentales de su administración en política exterior: el apoyo inquebrantable a Palestina y al Eje de la Resistencia, que fue una prioridad central de su gobierno, y la política de "Mirar hacia el Este", diseñada para consolidar la cooperación política, económica y estratégica con los países del hemisferio oriental, especialmente en Asia, mientras se reducía la dependencia de Occidente.
En junio, se celebró la primera vuelta de las elecciones adelantadas. Masud Pezeshkian emergió como el ganador con 10,4 millones de votos (43,5% del total), seguido por Said Yalili con 9,4 millones de votos (37,7%). Mohamed Baqer Qalibaf obtuvo 3,4 millones (14%), mientras que Mohamad Purmohamadi recibió 200.000 votos (0,8%).
Como ninguno de los candidatos alcanzó la mayoría necesaria (50% más uno de los votos), fue necesaria una segunda vuelta celebrada el 5 de julio, en la que Pezeshkian se consagró como el nuevo presidente de Irán tras ganar con aproximadamente 16,4 millones de votos. Yalili, por su parte, recibió alrededor de 13,5 millones de votos.
La elección de Pezeshkian se vio empañada por el asesinato, el mismo día de su investidura, de Ismail Haniya, jefe de la oficina política de HAMAS, quien había acudido como invitado a la toma de posesión del nuevo presidente iraní.
La estrategia de asesinatos selectivos ha sido utilizada por Israel durante décadas. El Mossad, los servicios secretos israelíes, tiene un largo historial de acciones contra personalidades palestinas y otros opositores a Israel en Europa, Siria, Líbano, Egipto e Irán. Sin embargo, si el objetivo final es debilitar a los grupos que se oponen a la colonización de Palestina, esta estrategia ha fracasado: cada persona asesinada ha tenido un sucesor, tal y como ha sucedido en el caso de Haniya.
En septiembre, dispositivos electrónicos utilizados por Hezbolá en Líbano fueron blanco de explosiones coordinadas, causando numerosas víctimas, incluyendo civiles, y dejando herido al embajador de Irán en Líbano.
Ese mismo mes, Seyed Hasan Nasralá, secretario general de Hezbolá, fue asesinado en un ataque israelí en Beirut, junto con Abás Nilforushan, subjefe de operaciones de la Guardia Revolucionaria de Irán. Hezbolá había desafiado la supremacía militar de Israel, estableciendo una “zona prohibida” dentro del territorio israelí y obligando a miles de colonos a huir del norte del país.
En octubre, Irán lanzó la Operación "Promesa Verdadera II" en represalia. Según el comunicado de la Guardia Revolucionaria, se dispararon cerca de 400 misiles balísticos contra objetivos militares clave en Tel Aviv y otras zonas. Fuentes iraníes aseguraron que más del 80% de los misiles impactaron en sus objetivos y que la sede del Mossad fue destruida en el ataque. También fue atacada la Base Aérea de Néguev, donde se encontraban escuadrones de aviones F-35.
El 26 de octubre, Israel respondió con una serie de ataques aéreos contra Irán. Fuentes militares iraníes informaron que la mayoría de los proyectiles fueron interceptados, aunque hubo daños limitados en Teherán, Juzestán e Ilam.
En noviembre, el acontecimiento más relevante para Irán fue la victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses. A pesar de especulaciones sobre diferencias en su equipo, Trump reimpuso la política de "máxima presión" contra Irán pocos meses después.
En diciembre, la caída del gobierno de Bashar al-Asad en Siria emergió como una de las mayores amenazas geopolíticas para Irán en décadas, al afectar su influencia en la región y fortalecer la posición de Israel y Turquía.
Por último, el 7 de febrero, el Líder de la Revolución Islámica de Irán, Seyed Ali Jamenei, descartó cualquier posibilidad de diálogo con Estados Unidos mientras persista la política de "máxima presión". Días antes del fin del año, Trump amenazó a Irán tras ataques contra Yemen, advirtiendo que cualquier disparo desde Yemen sería considerado un ataque iraní con "serias consecuencias".
El año 1404 se perfila como un momento clave para Irán. El país enfrenta desafíos significativos, desde la escalada militar de Israel en la región hasta la renovada presión de la estrategia estadounidense de "máxima presión". Sin embargo, el giro hacia un orden mundial multipolar también abre nuevas oportunidades para que Teherán refuerce su posición en la escena internacional.