El Gobierno turco ha citado al nuevo embajador de Alemania en Ankara para trasmitirle sus quejas debido a la moción aprobada en 2016 por el Bundestag (el Parlamento Federal de Alemania) con el fin de declarar como genocidio la masacre de armenios perpetrada por las fuerzas otomanas.
El rotativo alemán Der Spiegel asegura que, con esta, ya son 17 las veces que el embajador Erdmann ha sido convocado por el Gobierno de Turquía.
El más reciente ejemplo de las tensiones entre Alemania y Turquía fue la detención de un activista alemán de derechos humanos en el mes de julio. Ankara acusó al hombre de "apoyar una organización terrorista" y Alemania respondió citando al embajador turco para que diera las explicaciones correspondientes.
Las relaciones entre las dos naciones dieron un giro brutal tras el golpe militar fallido de julio de 2016, cuando Ankara acusó a Berlín de albergar a presuntos partidarios del clérigo opositor Fethulá Gülen, a quien Turquía acusa, sin pruebas, de ser el cerebro detrás de la intentona golpista.
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