"El canciller (uruguayo, Rodolfo Nin Novoa) hizo un anuncio inconsulto, de entregar la presidencia pro témpore del Mercosur (al presidente venezolano, Nicolás Maduro) sin convocar a una Cumbre de Presidentes. Por eso nosotros hemos reaccionado con firmeza", dijo el domingo el canciller paraguayo, Eladio Loizaga.
El canciller (uruguayo, Rodolfo Nin Novoa) hizo un anuncio inconsulto, de entregar la presidencia pro témpore del Mercosur (al presidente venezolano, Nicolás Maduro) sin convocar a una Cumbre de Presidentes. Por eso nosotros hemos reaccionado con firmeza", dijo el canciller paraguayo, Eladio Loizaga.
El alto diplomático paraguayo recordó que en los 25 años de existencia del Mercosur nunca ha habido un caso similar en el que se haya pasado la presidencia de este órgano en un acto sin la reunión del consejo de ministros.
También hizo hincapié en la necesidad de que el Mercosur vuelva a sus orígenes, es decir, ser un espacio de libre circulación de bienes y servicios, y dejar a un lado los temas y los discursos ideológicos que, aseguró, “no llevan a ningún lado”.
Además, informó que el lunes asistirá a una reunión convocada por el canciller uruguayo para abordar la posible presidencia de Venezuela y confirmó que Paraguay seguirá oponiéndose a la presidencia pro témpore de Caracas.
“Paraguay no acepta que la presidencia del bloque fuera traspasada a un Estado cuyo Gobierno está buscando el cierre de un poder del Estado a través del Supremo Tribunal de Justicia, el cierre de la Asamblea Nacional de Venezuela”, dijo.
No solo Paraguay se opone a este traspaso, también Brasil rechazó la posibilidad de entregar la presidencia pro témpore del Mercosur al presidente venezolano, Nicolás Maduro, mientras que, el mandatario argentino, Mauricio Macri, declaró que su país podría asumir esa presidencia en lugar del país caribeño.
Bolivia es uno de los únicos países que apoya a Venezuela en este asunto y apuesta por ver a Caracas en la presidencia del Mercosur.
El jefe de Estado de dicho país, Evo Morales, cree que el rechazo de estos países se debe a “manipulaciones desde el norte”, es decir, de Estados Unidos, con el objetivo de quebrar a las organizaciones sudamericanas como el Mercosur.
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