Nicaragua rompió relaciones con el Estado de Israel por considerar al gobierno de Benjamín Netanyahu como fascista, genocida y criminal de guerra en contra de Palestina, El Líbano y otros pueblos de Oriente Medio; esto tras una petición de la Asamblea Nacional del país centroamericano.
Antes de estas declaraciones de la vicemandataria, los diputados de la Asamblea Nacional nicaragüense en una sesión especial, donde asistió parte del cuerpo diplomático, incluida la cónsul palestina, condenaron el genocidio perpetrado por Israel y por unanimidad aprobaron una declaratoria que pedía al presidente Ortega romper las relaciones con el gobierno israelí.
La declaratoria de los diputados dice también que Nicaragua ha tomado acciones en la Corte Internacional de Justicia, rechazando las violaciones al Derecho Internacional, Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario que comete Israel.
Los legisladores nicaragüenses además condenaron el patrocinio de parte de la Unión Europea y los Estados Unidos al Estado sionista de Israel para cometer el genocidio en contra de Palestina, que a un año ha dejado más de 42 mil muertos.
Carlos Daniel Jarquín, Managua.
hae/rba
