- 3 de febrero de 2019
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asegura que uno de los objetivos de la presencia de Estados Unidos en Irak es “vigilar a Irán”.
Sus palabras suscitaron gran descontento entre las autoridades iraquíes, como el presidente, Barham Salih.
- 28 de mayo de 201 9
El Parlamento de la región semiautónoma del Kurdistán iraquí eligió a Nechirvan Barzani como nuevo presidente, tras una prolongada parálisis política a raíz del fallido intento de separación a través de un referéndum en 2017.
- 1 de julio de 2019
El primer ministro iraquí, Adel Abdul-Mahdi, emitió una orden para que las fuerzas populares de Al-Hashad Al-Shabi, con un rol clave en la derrota del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), se integren más estrechamente en las Fuerzas Armadas, en el plazo de un mes.
- Agosto de 2019
Se registran varios ataques contra bases militares de las Unidades de Movilización Popular iraquíes. Los iraquíes atribuyen los ataques al régimen israelí, y el propio Israel no lo desmiente.
- 1 de octubre de 2019
Comienzan las protestas anticorrupción. Los iraquíes toman las calles para protestar contra la pobreza y la corrupción administrativa.
Las manifestaciones se tornan violentas y se registran numerosas muertes. Las autoridades denuncian que infiltrados apoyados desde el exterior desataron la violencia.
El Gobierno iraquí y la máxima autoridad religiosa del país, el ayatolá Seyed Ali Sistani, defendieron el derecho de los ciudadanos a manifestarse. Pero condenaron los actos violentos..
- 29 de noviembre de 2019
El liderazgo religioso de Irak insta al Parlamento a retirar su apoyo al Gobierno. Un día después, el premier presentó su renuncia al Parlamento.
- 5 de diciembre de 2019
Decenas de miles de manifestantes salen a las calles para expresar su apoyo al ayatolá Sistani y para repudiar los actos vandálicos de los elementos infiltrados.
- Sanciones de Estados Unidos
Durante el último mes, Estados Unidos ha sancionado a varias figuras vinculadas con las Unidades de Movilización Popular iraquíes, por su supuesto rol en la represión y corrupción en Irak. No obstante, esta medida ha sido condenada por varios grupos políticos iraquíes, que la consideran un acto de injerencia y una violación de la soberanía de su país.
mag/rba