El viceministro ruso de Defensa, Yuri Borísov, ha anunciado este sábado que el Ejército ruso cuenta con diez cazas interceptores MiG-31 equipados con misiles hipersónicos Kinzhal: un misil aire-tierra, un ‘arma moderna’ de gran alcance que ‘puede superar los sistemas de defensa antimisiles y de defensa aérea. El misil interceptor es capaz de alcanzar velocidades de al menos 18 000 kilómetros por hora.
Los cazas equipados con misiles Kinzhal volaron por primera vez este viernes sobre Moscú durante el ensayo de la parte aérea del desfile del Día de la Victoria.
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