“Decid a todos los habitantes de la región del Donbás que todavía se ven obligados a ver banderas rusas en nuestra tierra ucraniana, que el Ejército ucraniano los liberará [...] por supuesto, también liberarán Crimea”, subrayó el lunes el mandatario ucraniano.
En su habitual discurso nocturno, emitido por la web presidencial, Zelenski puso énfasis en que la ofensiva rusa en Donbás, este de Ucrania, iniciada el 24 de febrero, ha comenzado a perder fuerza.
De igual modo, Zelenski acusó a Rusia de Vladimir Putin de tratar de hacer que los ucranianos no sepan nada sobre su territorio y sobre cómo las Fuerzas Armadas están tratando de liberarlo. “Están tratando de que dejen de pensar en volver a la vida normal, obligándolos a reconciliarse”, añadió.
La lucha en Donbás, la más brutal de historia militar de Europa
Zelenski también alertó que el conflicto en la región de Donbás (este) “pasará a la historia militar como una de las luchas más brutales de Europa y para Europa”; Es más, prosiguió, el precio de esta batalla para Ucrania “es muy alto. Es simplemente aterrador”. Ante tal coyuntura, el mandatario pidió a sus socios occidentales que envíen armamentos al territorio ucraniano.
Asimismo, denunció el bloqueo informativo, e incluso “civilizacional”, impuesto por el Ejército de Rusia, y pidió que se comunique a los habitantes del sur ocupado que “habrá liberación”.
Zelenski también informó que una gran parte de la región de Járkov, en el este de Ucrania, fue liberada; en efecto, sostuvo, el enemigo fue expulsado de las zonas de Zhytomyr, Kyiv, Chernihiv y Sumy. “Se detuvo la invasión de los ocupantes en el sur de Ucrania”, afirmó; no obstante, la ciudad portuaria de Odesa (suroeste), sigue siendo un objetivo para la flota rusa, lamentó.
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