El Movimiento de Resistencia Islámica del Líbano (Hezbolá) atacaron el sábado una decena de asentamientos ilegales, entre ellos Al Manara, Nahariya, Maalot y Kiryat Shmona, así como objetivos militares en las ciudades israelíes de Safad y Haifa.
Las ofensivas también impactaron concentraciones de tropas del ejército del enemigo israelí en varios puntos en el norte de los territorios ocupados, cerca de la frontera con el Líbano.
“Los combatientes de la Resistencia Islámica derribaron con un misil tierra aire un dron Hormuz 450” y “lanzaron un ataque aéreo con drones de asalto contra una reunión de fuerzas del ejército enemigo israelí al este de la ciudad de Maroun al-Ras, que alcanzó sus objetivos con éxito”, añadió comunicó el movimiento.
Hezbolá seguirá la guerra “hasta la victoria”
La misma jornada, los combatientes de Hezbolá emitieron un mensaje de apoyo al nuevo líder del grupo, el sheij Naim Qasem, asegurando que tienen “suficientes misiles y aviones no tripulados” para continuar la guerra contra Israel “hasta la victoria”.
“Hemos preparado suficientes misiles y aviones no tripulados para nuestro enemigo (…), y con nuestro gran poder destruiremos los sueños de todo agresor o traicionero (…), y regresaremos con la victoria, si Dios quiere”, se lee en el mensaje.
Hezbolá ha intensificado sus ofensivas contra los objetivos israelíes en represalia por las agresiones brutales de los sionistas contra El Líbano, las cuales han dejado más de 3150 muertos.
El nuevo líder de Hezbolá, el sheij Naim Qasem, enfatiza que todo el territorio ocupado por Israel está en la mira de drones y misiles del movimiento libanés, y que Israel no podrá tener éxito en la guerra.
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