En un comunicado emitido el domingo, el ejército israelí anunció que uno de sus aviones no tripulados (drones) se ha estrellado en el sur del territorio libanés durante “actividades operativas” en la zona fronteriza con El Líbano. “No hay riesgo de que se filtren informaciones”, señaló, sin ofrecer más detalles.
Por el momento, se desconoce si el dron israelí fue derribado o si se estrelló por una avería.
Más temprano en la misma jornada, el Ejército libanés había denunciado que los drones de reconocimiento israelíes entraron en el espacio aéreo de El Líbano y sobrevolaron las partes sureñas del país varias veces.
Los drones israelíes entraron en el cielo libanés alrededor de las 5:50 a.m. (hora local) del viernes y salieron a las 12 p.m., realizando 20 misiones, precisó, antes de recordar que tales acciones suponen una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU).
Mientras tanto, el ente militar libanés subrayó que todas las violaciones israelíes están siendo monitoreadas en coordinación con la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para El Líbano (FPNUL).
La caída del dron israelí se produce en momentos en los que se ha hecho sonar las alarmas de una posible guerra entre Israel y El Líbano a raíz de la muerte de uno de los combatientes del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), llamado Ali Kamel Mohsen, en un ataque aéreo del régimen israelí cerca del aeropuerto Internacional de Damasco, capital de Siria.
Aturdido por dónde llegará la venganza de Hezbolá, Israel ha confesado que no mató deliberadamente al militar libanés. No obstante, ante el temor por el poder de Hezbolá, el régimen de Tel Aviv ha puesto en máxima alerta a sus fuerzas y está aumentando su presencia militar en la zona fronteriza con El Líbano, llevando a cabo entrenamiento con munición real.
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