• Presidente estadounidense Joe Biden en una rueda de prensa en la Casa Blanca, Washington D.C. (la capital), 9 de octubre de 2021. (Foto: Getty Images)
Publicada: lunes, 11 de octubre de 2021 4:40

La Administración de EE.UU., presidida por Joe Biden, muestra poco entusiasmo por desarrollar los llamados acuerdos de Abraham, impulsados por su antecesor Trump.

A un año de que se firmaran los denominados acuerdos de Abraham, destinados a acelerar la normalización árabe-israelí, con el respaldo del entonces presidente estadounidense Donald Trump, los partidarios de este pacto dicen que el presidente Biden no muestra interés alguno en un tema que goza de un apoyo bipartidista en un Congreso muy polarizado.

Es probable que el estancamiento del proyecto proisraelí proporcione ventajas a los republicanos de cara a las elecciones de 2022 y 2024, que critican a la Administración de Biden por su política de restablecimiento de los lazos con los palestinos, suspendidos durante el mandato de Trump, según publica The Hill.

 

El exsecretario de Estado estadounidense Mike Pompeo, uno de los arquitectos de dichos polémicos acuerdos y posible candidato presidencial republicano en 2024, viajará a Al Quds (Jerusalén) la próxima semana para celebrar el primer aniversario de los acuerdos Abraham con los funcionarios del régimen de Israel.

Fue bajo el impulso de Estados Unidos de Trump, que los Emiratos Árabes Unidos (EAU) junto a Baréin, firmaron con el régimen de Israel los llamados Acuerdos de Abraham el 15 de septiembre de 2020 en Washington, convirtiéndose en el tercer y cuarto Estado árabe respectivamente en normalizar relaciones con Israel después de Egipto en 1979 y Jordania en 1994. 

Con todo, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se reunirá este miércoles con los cancilleres de Israel, Yair Lapid, y de EAU, Abdullah bin Zayed Al Nahyan, para analizar, entre otros, los avances en la normalización de relaciones entre el régimen israelí con los países árabes a un año de la firma de los llamados Acuerdos de Abraham.

Mientras el expresidente norteamericano Trump alababa el acuerdo como “histórico” y un “enorme logro”, el pacto ha sido ampliamente condenado tanto a nivel regional como internacional. 

Las autoridades palestinas califican la medida de “puñalada por la espalda” a la causa palestina, así como una muestra del “servilismo” de los EAU hacia el régimen sionista y su aliado estadounidense.

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