• El expresidente de Ecuador Rafael Correa durante una entrevista en Quito (la capital), 18 de enero de 2018.
Publicada: sábado, 20 de enero de 2018 1:09

El fundador del portal de filtraciones Wikileaks, Julian Assange, perderá la protección de la que goza en la embajada de Ecuador en el Reino Unido, según opina el expresidente ecuatoriano Rafael Correa, quien otorgó el estatus de asilo político al australiano.

Correa realizó el jueves estas declaraciones en una entrevista exclusiva con la agencia de noticias francesa AFP desde una residencia en el norte de la capital de Ecuador, Quito, donde se encuentra desde hace dos semanas para promover el ‘no’ en la inconstitucional consulta del 4 de febrero, con la que su excompañero de bancada, el actual presidente, Lenín Moreno, busca inhabilitarlo y desterrar al correísmo de la escena política.

Durante la entrevista, Correa admitió que después de una década en el poder, lo tiene “cuesta arriba” en esta nueva contienda, pues tras haberse desvinculado del gobernante partido, Alianza País (AP), ahora enfrenta a exaliados y a sus adversarios tradicionales.

Entre su legado figura el asilo que otorgó a Assange en la embajada ecuatoriana en Londres. Al ser preguntado sobre el futuro del australiano, Correa ha respondido: “Temo mucho por la seguridad de Julian Assange. Yo creo que es cuestión de tiempo que este gobierno que ha traicionado todos los ideales (...) le quite el respaldo. Bastaría una presión de Estados Unidos para hacerlo, y seguramente ya lo está haciendo, y tal vez esperan al resultado del 4 de febrero para tomar la decisión”.

Temo mucho por la seguridad de Julian Assange. Yo creo que es cuestión de tiempo que este gobierno que ha traicionado todos los ideales (...) le quite el respaldo. Bastaría una presión de Estados Unidos para hacerlo, y seguramente ya lo está haciendo, y tal vez esperan al resultado del 4 de febrero para tomar la decisión”, dice el expresidente de Ecuador Rafael Correa.

 

Para Correa, es cuestión de tiempo para que eso suceda porque, según él, Moreno no es un hombre de convicciones y está entregado a los poderes externos como es caso de “las intervenciones del embajador de Estados Unidos, descaradas, metiéndose en política interna”, ha manifestado el expresidente.

Assange no puede salir de la embajada de Ecuador en Londres desde 2012 porque, de hacerlo, casi con toda seguridad el Reino Unido lo extraditaría a Suecia, que pretende juzgarlo por presuntos delitos sexuales.

Además, si es extraditado a Suecia, las autoridades de este país lo extraditarían a su vez a Estados Unidos, donde sería procesado por filtrar secretos sobre la seguridad estadounidense y podría ser condenado a la pena de muerte.

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