En un artículo publicado el miércoles, la revista estadounidense The National Interest destacó la elevada capacidad de las fuerzas terrestres tanto en el propio Ejército del como en el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, país que figura entre las naciones “más poderosas e influyentes” en Asia Occidental. “Irán es principalmente una potencia terrestre”, se lee en la nota.
El medio cita al think tank (laboratorio de ideas) Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, con sede en Washington D.C., que en una estimación elaborada en 2013, dio a conocer que las fuerzas terrestres de la República Islámica estaban formadas por 350 000 soldados en servicio activo, incluidos 130 000 profesionales y 220 000 reclutas.
De acuerdo con dicha información, las mencionadas tropas están organizadas en cuatro divisiones blindadas, dos divisiones de infantería mecanizada, cuatro divisiones de infantería ligera, seis grupos de artillería, dos divisiones de fuerzas especiales, una brigada aerotransportada, tres o cuatro brigadas de comando, un número desconocido de unidades de Aviación y otras brigadas blindadas y de infantería.
Asimismo, destacó varios vehículos blindados a disposición de las fuerzas terrestres, incluidos 1663 tanques de batalla principales, 725 vehículos de combate de infantería y de reconocimiento, 640 vehículos blindados de transporte de tropas, 2322 obuses remolcados y autopropulsados y 1476 lanzacohetes múltiples.
Irán rellenó con éxito vacío provocado por las sanciones en su industria militar
Conforme precia el texto, ante las sanciones que recaen sobre Irán tras la victoria de la Revolución Islámica (1979), la industria nacional de armas del país persa luchó por rellenar el vacío que generó el bloque en su cuerpo.
En este sentido, el informe subraya la gran cantidad de armas de apoyo fabricadas por Irán para la infantería. Entre otros, prosigue la nota, se destaca el tanque Karrar (Atacante), fabricado por los expertos iraníes, que se presentó por primera vez en marzo de 2017. Este carro de combate es comparable al modelo ruso T-90, a los estadounidenses M-60 y Abrams, y a los británicos M-48 y Chieftain.
Por su parte, el CGRI cuenta con su propia Fuerza Terrestre. El artículo se refiere a la Fuerza Quds como el cuerpo más importante del Cuerpo de Guardianes, y probablemente de todas las Fuerzas Armadas del país persa. Según el texto, esta fuerza consiste en 15 a 30 miles de las mejores tropas del CGRI.
Resaltando todo ello, The National Interest indica que la mera magnitud de Irán, tanto en geografía como en población, es un factor de suma importancia que disuade la invasión al país.
La Fuerza Terrestre de Irán ha desempeñado un papel destacado en todas las guerras, incluidas la guerra impuesta por el entonces régimen de Irak contra Irán (1980-1988) y la lucha contra el grupo terrorista Daesh más allá de las fronteras del país persa.
Según destacó en su día el comandante de la Fuerza Terrestre del Ejército de Irán, el general de brigada Kiumars Heidari, el conjunto de unidades que comanda es la quinta potencia terrestre más fuerte del mundo.
Durante las cuatro décadas que han transcurrido tras la victoria de la Revolución Islámica, la República Islámica ha conseguido grandes logros en diferentes ámbitos, el militar incluido, sin someterse a los dictados de EE.UU. Por esa misma razón, supone una gran amenaza para los intereses de Washington y sus aliados en la región.
El país, aclarando una y otra vez que su capacidad militar no representa amenaza alguna para otros países, asegura que su doctrina de defensa se basa simplemente en la disuasión.
En esta línea, las fuerzas iraníes, más determinadas que nunca, siguen protegiendo las fronteras y el territorio nacional del país ante cualquier amenaza.
Entretanto, las Fuerzas Armadas del país realizan de manera frecuente maniobras, en las que se entrenan estrategias y tácticas militares para profesionalizar y mejorar las capacidades de las fuerzas para responder ante amenazas.
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