Dos unidades de siete megavatios de los cinco que forman el proyecto se unieron a las redes de suministro a principios del mes en curso durante una ceremonia con la presencia del ministro iraní de Energía, Hamid Chitchian.
Ambas plantas fueron construidas por la Organización de Energías Renovables de Irán (SUNA, por sus siglas en inglés). Una vez completado el proyecto, se generará un total de 35 megavatios de electricidad.
Cada una de las dos plantas cubre un área de unas 10 hectáreas y se encuentran a las afueras de la ciudad de Hamedán.
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