“La situación generada por Estados Unidos ha dividido a los venezolanos y va a dividir también a la región”, ha advertido el ministro de Exteriores de Bolivia en una entrevista exclusiva concedida a la cadena rusa RT, publicada este lunes.
Washington se posicionó al lado de Juan Guaidó, jefe de la Asamblea Nacional (AN) de Venezuela —de mayoría opositora y declarada en desacato en 2016— quien el miércoles pasado se autoproclamó “presidente interino” de la República Bolivariana.
Preguntado sobre la postura de algunos países latinoamericanos de reconocer a Guaidó en lugar de Nicolás Maduro, elegido el pasado mayo en las urnas para un nuevo mandato que inició el 10 de este mes, Pary ha dejado claro que “los únicos que pueden reconocer o no a un presidente es el pueblo venezolano”.
De hecho, el jefe de la Diplomacia boliviana ha subrayado que La Paz respeta la soberanía e independencia de Venezuela y no tiene la intención de interferir en los asuntos internos de Caracas.
La situación generada por Estados Unidos ha dividido a los venezolanos y va a dividir también a la región”, denuncia el canciller de Bolivia, Diego Pary.
Bolivia “no va a entrar en este juego”, ya que “solamente reconocemos Estados soberanos”, ha remarcado Pary, además de recordar el respaldo del Gobierno de Evo Morales al diálogo, convocado por México y Uruguay, como la única solución hacia la paz en Venezuela.
“La región de América Latina y el Caribe ha expresado de manera unánime en diferentes momentos que es una zona de paz y ratificamos que el único camino para solucionar las dificultades internas es el diálogo y la negociación”, ha precisado.
De acuerdo con el ministro boliviano, resulta imprescindible no provocar el enfrentamiento entre el pueblo venezolano, ya que un choque de sectores solo “lleva hacia la catástrofe”.
La autoproclamación de Guaidó, con el apoyo de EE.UU., ha generado turbulencias en Venezuela. En el plano internacional, varios países aliados de Washington han apoyado a los golpistas; sin embargo, Bolivia, Cuba, México, Rusia, Irán, China y Siria, entre otros Estados antimperialistas, anunciaron su pleno respaldo al Gobierno de Maduro.
El sábado, en una sesión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU), Moscú y Pekín bloquearon un proyecto de declaración de Washington que favorecía a Guaidó.
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