“En el nivel táctico y operativo, los ataques (…) son poderosos. Pero a nivel estratégico, no estamos teniendo éxito”, reconoció el martes el general retirado Amos Gilad, exdirector de asuntos políticos y militares del ministerio de asuntos militares israelí.
Conforme a Gilad, Israel ha alcanzado ciertos logros, pero ninguno ha resultado en la victoria mayor, es decir, “que Irán abandone sus planes de establecer un frente en Siria”.
El ex alto oficial de inteligencia israelí no ofreció recomendación alguna sobre cómo persuadir u obligar a Irán a acabar con su asesoramiento militar en Siria, pero rechazó la idea de que la solución sea Rusia, el socio de Teherán que también ayuda en la lucha antiterrorista al Gobierno sirio, presidido por Bashar al-Asad.
En el nivel táctico y operativo, los ataques (…) son poderosos. Pero a nivel estratégico, no estamos teniendo éxito”, reconoció el general retirado Amos Gilad, exdirector de asuntos políticos y militares del ministerio de asuntos militares israelí, sobre el fracaso de los ataques israelíes contra Siria para obligar a Irán a abandonar el país árabe.
“Es un cuento que los rusos son capaces de conducir a los iraníes fuera de Siria. Me permito decir, como alguien con docenas de años de experiencia en ambos lados, que esto no es cierto”, afirmó.
Irán brinda apoyo a Siria, lo que ha permitido al Ejército del país árabe acelerar sus avances en distintos frentes contra los grupos terroristas. Teherán ha expresado siempre que su presencia en el país árabe es legítima y legal, dado que responde a la petición del Gobierno sirio, reconocido por las Naciones Unidas y la comunidad internacional.
Eso mientras desde el inicio del conflicto en Siria en 2011, Israel ha realizado numerosos bombardeos contra objetivos del Ejército sirio. Las autoridades de Damasco atribuyen las agresiones israelíes a sus intentos de apoyar a facciones terroristas.
Al respecto, Teherán ha advertido al régimen de Tel Aviv de que dará “una respuesta definitiva” a sus ofensivas aéreas.
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