Amir Said Iravani instó igualmente al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) a tomar medidas decisivas para poner fin a la escalada de violencia del régimen de Tel Aviv en la región.
“La República Islámica de Irán condena enérgicamente estos horribles ataques y pide al Consejo de Seguridad que condene a Israel y adopte medidas decisivas para poner fin a sus actividades maliciosas en la región. Abordaremos este acto internacionalmente ilícito en la reunión del Consejo prevista para esta tarde”, dijo Iravani en una declaración dirigida a esa instancia de la ONU sobre “La situación en Oriente Medio: (Siria)” este viernes.
El documento precisa que “Siria sigue sufriendo problemas de seguridad, en particular en zonas bajo la ocupación de fuerzas ilegales estadounidenses y grupos designados como terroristas por las Naciones Unidas.”
El representante iraní ante el Consejo de Seguridad de la ONU condenó igualmente en su declaración los más recientes ciberataques mortales cometidos por Israel en el Líbano que dejó un saldo de al menos 37 libaneses muertos y más de 3000 heridos el martes y el miércoles.
“Los brutales ataques terroristas que Israel llevó a cabo los días 17 y 18 de septiembre en el Líbano y en una parte de Siria con el objetivo de matar en masa a civiles inocentes son una flagrante violación del derecho internacional, en particular del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos, y constituyen un crimen contra la humanidad”, refiere la declaración.
De igual manera, el embajador de la nación persa ante el Consejo de Seguridad de la ONU hizo un llamado a este organismo para que detenga “las constantes violaciones por parte de Israel de la soberanía y la integridad territorial de Siria, incluida su continua ocupación del Golán sirio”.
“La soberanía, la independencia política, la unidad y la integridad territorial de la República Árabe Siria deben ser plenamente respetadas por todos, y las fuerzas extranjeras ilegales deben retirarse de su territorio”, ha afirmado.
Según la nota, un ejemplo destacado es la ocupación estadounidense que, con el pretexto de luchar contra el terrorismo, apoya y protege a grupos terroristas, y la constante agresión del régimen de ocupación de Israel en apoyo de grupos terroristas.
El documento condena asimismo los ataques de del régimen sionista a civiles y a infraestructuras civiles en Siria, las impunes violaciones de su soberanía e integridad territorial y la ausencia de respuesta del Consejo de Seguridad. “Las agresiones y acciones ilegales israelíes suponen una grave amenaza para la paz y la seguridad internacionales”, expresa también la declaración.
gec/tmv
