El arquitecto de la República Islámica de Irán, el Imam Jomeini (que descanse en paz), es símbolo de la resistencia y la lucha contra la arrogancia mundial y el imperialismo, y el adalid de los valores del Islam verdadero. Dedicó varios años de su vida a luchar contra el régimen monárquico de Pahlavi incluso durante su exilio en Turquía, Irak y Francia, hasta que hasta el logro definitivo de la Revolución Islámica de Irán el 11 de febrero de 1979. El difunto imam neutralizó varios complots internos y externos como la guerra impuesta por el exrégimen baasista de Sadam Husein a Irán (1980-1988).
El Imam Jomeini falleció el 3 de junio de 1989 a la edad de 87 años en un hospital en Teherán (capital iraní). Cada año, millones de los iraníes y fieles musulmanes de todo el mundo concurren al mausoleo Imam Jomeini en Teherán para rendir homenaje y reiterar su compromiso con los valores revolucionarios de este líder iraní.
Acabar con una monarquía hereditaria que tuvo una historia milenaria
En la historia de Irán, el Imam Jomeini llevó a cabo dos grandes y sin precedentes tareas. Una fue la destrucción de la estructura en la que se basaba una monarquía hereditaria cruel.
Esta monarquía hereditaria tuvo una historia milenaria en el país persa. En esta estructura vieja y abandonada, algunas personas llegan a gobernar con el poder de sus espadas y ejércitos, y luego se lo pasaron a otras personas de forma hereditaria, fue una tradición errónea e irrazonable que dominó Irán durante miles de años. La primera tarea que llevó a cabo el difunto Imam fue destruir esta estructura errónea y confiar los asuntos a la gente.
Sistema Islámico
La segunda gran tarea que llevó a cabo nuestro magnánimo Imam fue crear un gobierno sobre la base del Islam. Esto no tenía precedentes en la historia de Irán.
La idea del gobierno islámico se gestó en la esfera del pensamiento del Imam Jomeini durante su exilio en Irak, y se convirtió en un factor determinante en el dinamismo de la lucha de la nación iraní. A raíz del temor que esta idea había insuflado en los pilares del tiránico régimen Pahlavi, al final, con el levantamiento al unísono de la nación iraní y el sabio y benévolo liderazgo del Imam Jomeini, provocó el colapso del sistema imperial y el establecimiento de la República Islámica de Irán.
Poder del pueblo
Otro principio del Imam Jomeini era la creencia en la determinación y el poder del pueblo, y la oposición al gobierno-centrismo. Esta fue una de las principales directrices del Imam Jomeini.
Confió en el voto del pueblo para las elecciones con el fin de gestionar el país. En todas las etapas y en todas las circunstancias, el Imam Jomeini enfatizaba que las elecciones deben celebrarse en la fecha prevista. Creía en el pueblo y respetaba profundamente los votos, los pensamientos y las decisiones del pueblo en el verdadero sentido de la palabra.
Defensor de los pobres y desfavorecidos
El Imam Jomeini fue un ferviente defensor de las clases débiles. Rechazaba la desigualdad económica de forma seria y severa. Fue un defensor de la justicia social en el verdadero sentido de la palabra.
La defensa de las clases desfavorecidas de la sociedad fue quizás uno de los temas que más repitió en sus discursos. Siempre enfatizaba, en sus directrices claras, que el mundo debería erradicar la pobreza.
Luchar contra la arrogancia mundial
El Imam Jomeini apoyó la lucha contra los matones internacionales y los poderes arrogantes. No mostró consideración por ellos. Fue un ferviente defensor de los oprimidos de todo el mundo. No se comprometió con poderes arrogantes.
“El Gran Satán” fue un término sorprendente que acuñó el Imam Jomeini sobre los Estados Unidos. El Gran Satán tiene un alcance muy amplio. Cuando consideras a alguien y alguna organización como Satanás, tienes claro cómo debes comportarte y sentir hacia ellos. Hasta el último día de su vida, el difunto Imam tuvo el mismo sentimiento hacia EE.UU.
Independencia del país
Otra directriz principal en los pensamientos de Imam Jomeini fue el tema de la independencia del país y el rechazo a la dominación arrogante. Este es otro capítulo importante.
El difunto imam creía en la independencia del país, y rechazaba la dominación extranjera sobre el país.
Unidad Nacional
El Imam Jomeini promovió la unidad nacional. Desde los primeros días de la victoria de la Revolución Islámica en Irán en 1979, el magnánimo Imam puso un énfasis único e incomparable en la unidad nacional y la solidaridad del pueblo.
Más allá de las fronteras iraníes
El mensaje universal de la Revolución Islámica de Irán se extendió al mundo entero. En realidad, el Imam Jomeini había provocado un levantamiento mundial. Durante las últimas cuatro décadas, la Revolución Islámica de Irán y su fundador han estado en el centro de la política mundial.
De hecho, el mensaje divino del Islam Jomeini actuó como un agente de movilización social contra los regímenes despóticos y tuvo un papel clave en la emancipación de las naciones oprimidas en Asia Occidental.
El liderazgo iraní propagó el mensaje liberador del Islam a otros países. Como resultado, se llevaron a cabo manifestaciones masivas a favor de la democracia en todo el mundo musulmán, inspirándose de la Revolución Islámica de Irán. El poder de la Revolución Islámica de Irán preocupó y puso en alarma a los regímenes pro estadounidenses en la región de Asia Occidental y sacudió los tronos de los déspotas árabes en Arabia Saudí, Baréin e Irak. Al mismo tiempo, Irán se embarcó en una ardua campaña para ganarse los corazones y las mentes de las naciones islámicas, desde Nigeria hasta los Balcanes y desde el Sudeste Asiático hasta Asia Central.
Uno puede ver claramente hoy en día que hay mucha admiración por la Revolución Islámica de Irán entre la gente común en los países de Asia Occidental, África y América Latina. Es un hecho incontrovertible que miríadas de culturas y naciones están siendo inspiradas por la Revolución Islámica, al apreciar la verdad de que el Islam es el único camino para liberar al mundo del autoritarismo arraigado y la arrogancia global.
Por Mohsen Khalif