“En última instancia, el tema de la llegada al poder de republicanos o demócratas es un problema interno y no debería importarnos demasiado”, recalcó el martes Hosein Amir Abdolahian, director general para el Parlamento de Irán, el mismo día en el que el actual presidente de EE.UU., Donald Trump, y su rival demócrata, Joe Biden, compitieron para tomar las riendas del país en los próximos cuatro años.
Según Amir Abdolahian, lo imprescindible es ver cómo estas elecciones afectarán los intereses nacionales, la región de Asia Occidental y el mundo entero. Actualmente, agregó, los europeos prefieren a los demócratas.
De hecho, añadió, la llegada del exvicepresidente Joe Biden al poder no significa que la situación mejorará y se levantarán todas las sanciones impuestas por Washington a Teherán. “A pesar de los muchos servicios prestados a EE.UU. por el régimen de Pahlavi en el pasado, las políticas estadounidenses hacia Irán nunca han sido amistosas”, subrayó.
También se refirió a algunas propuestas de la celebración de un diálogo entre Teherán y Washington, pero dijo que la estúpida decisión de Trump de ordenar el asesinato del teniente general Qasem Soleimani, el comandante de Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán —en una operación terrorista en enero en Bagdad (capital iraquí)— “ha destruido toda confianza” en el inquilino de la Casa Blanca.
Por otro lado, Amir Abdolahian precisó que para analizar estos comicios, resulta imprescindible abordar la situación interna de la sociedad estadounidense, que debe hacer frente a muchos problemas como la pobreza, la crisis económica y sanitaria.
Incluso antes de la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, Estados Unidos estaba enfrentando serios desafíos, dijo, para luego hacer alusión a la alta sensibilidad de estas elecciones debido a “la conducta de Trump con sus rivales electorales”.
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