El anuncio se produce un día después de que haya expirado la primera fase del alto el fuego de 42 días entre Israel y la Resistencia palestina en la Franja de Gaza. La segunda fase debería empezar este domingo con el objetivo de terminar la liberación de retenidos israelíes en Gaza y poner fin a la agresión sionista que mató en 15 meses a al menos 48 388 palestinos.
Israel aprobó la propuesta de Estados Unidos para prolongar la tregua durante el mes sagrado de Ramadán a cambio de la liberación de la mitad de los retenidos israelíes en el enclave.
El Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina, HAMAS, por su parte, rechazó la iniciativa, diciendo que la segunda fase debe incluir la liberación de rehenes y prisioneros palestinos y la retirada de las fuerzas israelíes de Gaza. El movimiento denunció que Israel pretende la liberación de sus retenidos sin detener su agresión genocida contra la Franja.
En esta línea, un comunicado de la oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, señala que “con el fin de la primera fase del acuerdo sobre los retenidos […] el premier ha decidido que, a partir de esta mañana, cesará toda entrada de bienes y suministros a la Franja de Gaza”.
Un portavoz de HAMAS ha calificado la medida de “chantaje barato” y “golpe de Estado” en el acuerdo de alto el fuego y ha instado a los mediadores y garantes de la tregua —Egipto, Catar y Estados Unidos— a conseguir que Israel reanude el suministro de ayuda.
HAMAS avisa que Israel continua con política de “matar de hambre al pueblo” gazatí
El portavoz palestino ha agregado que “la decisión de Netanyahu de bloquear la llegada de la ayuda a Gaza muestra una vez más el feo rostro de la ocupación israelí” y llamado a la comunidad internacional a ejercer presión sobre el régimen israelí para que “deje de matar de hambre” al pueblo gazatí.
El bloqueo de la entrada de ayuda humanitaria se produce en el segundo día del sagrado mes de ayuno musulmán y mientras toda la población del enclave depende totalmente de la asistencia porque se desplaza y no tiene ingresos.
Durante el alto el fuego, 600 camiones entraban a Gaza al día, lo que apenas era suficiente para la enorme demanda de los palestinos después de 470 días de la guerra genocida.
Además de la ayuda alimentaria, Israel ha bloqueado la entrada de tiendas de campaña, lonas y ropa de invierno, los cuales son vitales para la supervivencia de la población en temperaturas extremas. Los palestinos también esperaban que hoy empezaran a entrar casas móviles en la Franja.
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