El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha desvelado este martes su controvertido “acuerdo del siglo”: un plan de 80 páginas que, según alega Washington, tiene como objetivo resolver el conflicto palestino-israelí, pero en realidad pretende liquidar la causa palestina, pues ignora todos los derechos de los palestinos.
En un comunicado emitido el mismo martes, la Casa Blanca ha ofrecido un resumen de los puntos más relevantes del supuesto plan de paz de Trump, que, entre otras concesiones y exigencias ilegales, pide la desmilitarización del Estado palestino.
El premier israelí, Benjamín Netanyahu, ha aclarado a su vez que la iniciativa estadounidense exige el desarme del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) y la desmilitarización de la asediada Franja de Gaza.
Con estas medidas, Trump busca frenar a los movimientos de la Resistencia palestina como HAMAS, pues defienden al pueblo palestino y la causa palestina ante la ocupación, agresiones y crímenes del régimen israelí.
De acuerdo con el proyecto, también se reconocerán los asentamientos israelíes en la Cisjordania ocupada a cambio de que durante los próximos 4 años se congele la construcción de nuevas colonias. Prevé, asimismo, que Al-Quds (Jerusalén) sea “la capital indivisible” de Israel. Impide a su vez el retorno de los refugiados palestinos a territorios ocupados.
Tanto el Gobierno palestino como distintos movimientos palestinos, entre ellos HAMAS, han condenado la iniciativa y dejado claro que los palestinos no permitirán que EE.UU. lleve a término el llamado ‘acuerdo del siglo’.
El jefe de la dirección política de HAMAS, Ismail Haniya, aseguró la jornada de ayer que Palestina no se puede negociar, comprar ni vender.
El portavoz del HAMAS, Sami Abu Zuhri, también ha condenado el “agresivo” plan propuesto por Trump, calificándolo de “absurdo” que está abocado al “fracaso”.
mnz/lvs/nii/