El Congreso de Guatemala se encuentra a las puertas de aprobar el presupuesto del próximo año, un presupuesto que de acuerdo al Ministerio de Finanzas Públicas supera los 16 mil millones de dólares.
Sin embargo, los impuestos que se recaudan no son suficientes para cubrir esa cantidad por lo que se tiene que recurrir a préstamos.
Más del 20 % del presupuesto se financia con préstamos a entidades internacionales, bonos del tesoro y donaciones, la polémica en torno al tema es que el partido que asumirá la presidencia en 2024 pidió un aumento de 235 millones de dólares que servirán para inversión en el ámbito público aseguró el encargado de discutir el presupuesto ante la comisión de finanzas en el Congreso.
Ante las peticiones del partido Semilla, el presidente de la comisión de finanzas dijo no estar de acuerdo, no solo por lo que representa el endeudamiento sino porque lo requerido no es congruente con el discurso de los diputados opositores durante la gestión del saliente presidente Alejandro Giammattei.
Analistas señalan que no es recomendable solicitar que el congreso apruebe tal cantidad de dinero, no obstante, el beneficio de la duda en un gobierno que rompe con todos los esquemas tradicionalistas podría eventualmente convencer a los diputados.
A pesar de la deuda que tendrá que adquirir el Estado para financiar el presupuesto general 2024, expertos en temas económicos subrayan que Guatemala aún no se encuentra por debajo de la línea roja crediticia ente bancos internacionales.
Miguel Salay, Ciudad de Guatemala
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