La Policía catalana ha restringido el acceso al recinto del parque de la Ciutadella, donde se encuentra el Parlament, pero un grupo de indignados pudo irrumpir en el mismo, mientras que otros han saltado las barreras para acceder al edificio de la Cámara catalana.
En algunas ocasiones, los manifestantes se han enfrentado a los agentes regionales del orden público cuando intentaban concentrarse frente al Parlament catalán, el cual, desde esta mañana, ha estado rodeado por un fuerte dispositivo policial con vallas y furgones policiales.
Estaba previsto que esta misma jornada tuviera lugar el pleno de investidura de Puigdemont como presidente de Cataluña, pero el presidente del Parlament catalán, Roger Torrent, lo ha aplazado hasta “cuando aseguremos un debate con garantías”, un debate “efectivo y sin injerencias”. La decisión ‘unilateral’ ha provocado una fractura entre los independentistas catalanes.
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