“Al principio no buscábamos niveles de enriquecimiento del 60 %. Ellos (los Estados europeos) pisotearon sus compromisos”, dijo el presidente iraní, Seyed Ebrahim Raisi, en una entrevista con Fareed Zakaria, periodista de la cadena estadounidense CNN, al margen del 78.º período de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas (AGNU) en Nueva York.
En este sentido, el mandatario iraní remarcó que “lo que hizo la República Islámica de Irán fue en respuesta a una ruptura del compromiso de los signatarios del acuerdo (de 2015)”, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés).
El jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), Mohamad Eslami, anunció el pasado junio que el enriquecimiento de uranio al 60 % de pureza se realiza de acuerdo a la ley parlamentaria de diciembre de 2020: “Acción estratégica para levantar las sanciones”.
La ley fue aprobada con el objetivo de eliminar las sanciones contra Irán, así como la producción de radiofármacos y detectores, entre otros objetivos.
En la entrevista con el presentador de CNN, Raisi rechazó categóricamente el enriquecimiento de uranio por parte del país a niveles cercanos al nivel de armas, diciendo que “se anunció oficialmente que la acción que pretendemos tomar no tiene como objetivo alcanzar armas nucleares de ningún tipo ni una dimensión militar de ningún tipo, pero es… una respuesta a la falta de compromiso demostrada por los europeos”.
También reiteró la convicción de larga data de Teherán de que la República Islámica no planea adquirir una bomba nuclear.
Estados Unidos, bajo el gobierno del expresidente Donald Trump, abandonó el acuerdo nuclear en mayo de 2018 y reimpusó sanciones que el acuerdo había levantado.
Las conversaciones para reactivar el acuerdo de 2015 comenzaron en Viena en abril de 2021, con la intención de eliminar las sanciones contra Irán y examinar la seriedad de Washington en volver a unirse al JCPOA.
Las discusiones, sin embargo, están estancadas desde agosto de 2022 debido a la negativa de Washington a eliminar todas las sanciones impuestas por la anterior administración estadounidense.
La Unión Europea (UE), que actúa como coordinadora de las conversaciones, envió entonces una nueva propuesta a la República Islámica para salir del estancamiento. Irán presentó su respuesta al borrador de propuesta el 15 de agosto de 2022, una semana después de que concluyera la última ronda de conversaciones en Viena.
Tras presentar su respuesta a la propuesta de la UE, Irán instó a Estados Unidos a mostrar “realismo y flexibilidad” para llegar a un acuerdo. Sin embargo, la administración del presidente Joe Biden tardó casi diez días en presentar su respuesta a los comentarios de Irán sobre el borrador de la UE.
Irán atribuyó el fracaso de la reactivación del PIAC a la dilación de la parte estadounidense a la hora de dar una respuesta y recalcó que pasar a la siguiente etapa habría sido posible si el gobierno de Estados Unidos hubiera mostrado una gran fuerza de voluntad y hubiera actuado responsablemente en sus promesas.
hnb
