En una conversación telefónica mantenida este sábado con su homólogo de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, el mandatario de Irán ha dejado claro que Teherán está dispuesto a extender las cooperaciones económicas con Ankara y usar la moneda nacional.
“El progreso de las relaciones y las cooperaciones entre Irán y Turquía, dos poderosos e influyentes países del mundo islámico, es de suma importancia para el desarrollo de la estabilidad y la seguridad de la región”, subraya Rohani.
El jefe del Ejecutivo persa también destaca la importancia de ampliar las colaboraciones entre Irán y Turquía para luchar contra el terrorismo en la región y fortalecer la seguridad en las fronteras comunes.
El progreso de las relaciones y las cooperaciones entre Irán y Turquía, dos poderosos e influyentes países del mundo islámico, es de suma importancia para el desarrollo de la estabilidad y la seguridad de la región”, enfatiza el presidente iraní, Hasan Rohani.
Además de lamentar el derramamiento de sangre de civiles en países como Sudán, Libia, Yemen y Afganistán..., Rohani precisa que Irán y Turquía, juntos, son capaces de poner fin a este peligroso proceso y solventar las crisis de la región y del mundo del Islam.
Erdogan, por su parte, ha señalado que Turquía e Irán son países amigos y hermanos, cuyas relaciones y cooperaciones benefician tanto a sus pueblos como a toda la región, y por ello insiste en la importancia de profundizar los lazos en todos los ámbitos, en particular en lo económico.
El jefe del Estado turco, aludiendo a la situación regional, ha comentado que Teherán y Ankara, aumentando sus cooperaciones, podrán desempeñar un mayor papel en la lucha contra el flagelo del terrorismo.
Por otro lado, Erdogan insiste en el carácter unilateral de las sanciones impuestas por Estados Unidos contra la República Islámica y asegura que nunca aceptarán “esos embargos crueles”.
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