La Agencia Telegráfica Central de Corea del Norte (KCNA, por sus siglas en inglés) ha informado que a partir de este martes Pyongyang cortará todas líneas de comunicación con Seúl a nivel de altas autoridades y militares de los dos países.
De hecho, esta medida es el primer paso de Corea del Norte para cerrar por completo todos los canales de contacto con Corea del Sur, puesto que, según la fuente, Pyongyang cree que no hay necesidad de conversaciones cara a cara o temas para discutir con su vecino peninsular.
El pasado 8 de junio, en una reunión sobre el trabajo de los departamentos para asuntos de Corea del Sur, Kim Yo-jong, la hermana del líder norcoreano y vicedirectora primera de un departamento del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea, y Kim Yong-chol, vicepresidente del partido, “instruyeron sobre todo cortar por completo todas las líneas de comunicación entre el Norte y el Sur”.
Además, hermana del líder norcoreano, Kim Jong-un, advirtió la semana pasada a Seúl que, si no cesa la propaganda contra Pyongyang en la frontera intercoreana, “enfrentará la peor etapa”. Sus amenazas iban dirigidas a cancelar las actividades económicas bilaterales, así como abandonar el pacto que ambas partes alcanzaron en 2018 con el fin de reducir la tensión militar.
Los opositores norcoreanos envían globos con folletos que critican a las autoridades de Corea del Norte. Pyongyang acusa al Gobierno de Corea del Sur de respaldar tales acciones, pero Seúl lo desmiente.
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